Los hechos ocurrieron en Roquetas de Mar (Almería), en la madrugada del 9 de septiembre, cuando dos personas golpean con una maza el cristal del escaparate de un comercio, si bien no consiguen acceder a su interior, al verse sorprendidos por vecinos que les recriminan su actuación, por lo que abandonan el lugar en una furgoneta.
La Guardia Civil inició la investigación la misma mañana del día 9, obteniendo la matrícula y características del vehículo, cuando se suma otro hecho: a primera hora de la tarde del mismo día, agentes de la Guardia Civil que patrullan la localidad roquetera, reciben el aviso del incendio de un vehículo en una de las calles, que arde junto a contenedores y viviendas, con el consiguiente riesgo que supone.
Lío de matrículas
Una vez sofocado el incendio, los agentes obtienen datos relevantes en las primeras indagaciones. Si bien en ese momento la furgoneta carece de matrícula, los agentes confirman que había sido robada en Bélgica.
La Guardia Civil relaciona la furgoneta quemada con la utilizada en el intento de robo del comercio, aunque la matrícula que tenían los agentes no coincidía con la que le correspondía a la furgoneta quemada.
El vecino
Las indagaciones concluyen en que uno de los autores de la tentativa de robo y la persona que incendió la furgo, son el mismo hombre, bien conocido por los agentes al contar con antecedentes y detenciones anteriores. El sospechoso habría cambiado la matrícula de la furgoneta sustraída por las de un vehículo que usaba habitualmente él mismo.
Tras identificarle, A. J. V. L., de 36 años, vecino de Roquetas de Mar, es arrestado como presunto autor de un delito de robo en grado de tentativa, falsedad en documento público, incendio, daños y robo de vehículo.