Agentes de los Mossos d’Esquadra han desarticulado una organización que introducía mujeres nigerianas en Cataluña, para ser explotadas sexualmente. Los cuatro detenidos, también nigerianos, tienen edades comprendidas entre los 37 y 43 años.
La investigación arranca en junio, cuando una mujer denunció ante los Mossos que un grupo de compatriotas, que anteriormente la habían obligado a prostituirse, la amenazaba.
Los agentes constataron, que la denunciante había llegado a Vic, en 2011, bajo el engaño de obtener trabajo. Cuando llegó a Cataluña le exigieron 50 euros y para pagarlos la obligaron a trabajar en el sexo, hasta que logró escapar en 2014.