Noelia de Mingo ha decidido iniciar una huelga de hambre en el centro penitenciario de Fontcalent (Valencia), el mismo en el que ingreso hace una semana tras atacar a dos mujeres en la localidad madrileña de El Molar. La que fuera médico ha comenzado una huelga de hambre al no estar de acuerdo con su regreso al mencionado centro penitenciario y no quiere seguir viviendo de esta manera.
Según Cadena Ser, Instituciones Penitenciarias no ha querido confirmar esta decisión por parte de la médico porque necesita que la dirección del centro penitenciario lo notifique de manera oficial. De todas maneras, se asegura que se muestra deprimida, muy arrepentida por lo que había sucedido con las dos mujeres (hay que recordar que una de ellas estuvo muy grave al ser herida en órganos vitales).
La que fuera doctora ya intentó clavarse el cuchillo que empleó en su última agresión, pero los agentes de la policía local del municipio de El Molar lograron evitarlo. Ahora se niega completamente a beber y a comer, aunque serán las próximas horas las más importantes para que las autoridades del centro penitenciario decidan que harán con la interna.
El nombre de Noelia de Mingo es muy conocido en la sección de sucesos: ya fue condenada en el año 2006 a 25 años de reclusión en un centro psiquiátrico (no ingresó en prisión por su enfermedad mental) por la muerte de tres personas en el centro en el que trabajaba, la Fundación Jiménez Díaz, tan solo tres años antes. Igualmente hirió a cinco personas (una de ellas sufrió heridas de mucha gravedad y con secuelas).
En el mes de octubre del año 2017, la Audiencia Provincial de Madrid sustituyó el internamiento en un centro psiquiátrico por un tratamiento ambulatorio y la custodia de un familiar (en este caso, su madre que superá los 80 años de edad), con la solicitud del juzgado de vigilancia penitenciaria de Alicante y un informe del Ministerio Fiscal favorable a dicho cambio.
En aquel momento todos los informes clínicos-forenses, en los que se coincidía en la situación de estabilidad de la propia enferma, no se conocían más episodios de descompensación, ella era completamente consciente de su enfermedad, de los síntomas que podían llevar a una descompensación de su trastorno y su conciencia del dolor que había provocado en las víctimas.
El último informe de los médicos que le atendían en el Hospital Infanta Sofía, con fecha del 3 de septiembre, los médicos aseguraban que Noelia de Mingo “no presenta descompensación psicótica” y acudía puntualmente a la administración de un antipsicótico, cada cuatro semanas.
El Servicio de Especialidades Psiquiatría Forense, el 2 de julio del año 2021, señaló que Noelia de Mingo “padece una enfermedad grave de curso crónico de la que en la actualidad no presenta sintomatología psicótica activa”. La paciente presentó justificante de inyección de antipsicóticos, de manera mensual, y la citaban para una nueva valoración en un período de tres meses.
A principios de este mes de septiembre, Noelia de Mingo salió de su casa con un cuchillo en la mano e hirió a dos mujeres en un supermercado.