En el bosque habían alterado los barrancos para poder almacenar agua, que conducían hasta los campos de cannabis, con mangueras movidas por bombas, alimentadas por generadores eléctricos; en esta zona de Noguera Ribagorzana (Huesca), limítrofe con Lleida (Cataluña) y ubicada en un espacio natural, los integrantes del grupo habían talado grandes superficies de pinares, aprovechado los bancales del bosque y barrancos, para cultivar marihuana. En paralelo, habían organizado una plantación de interior, dentro de un edificio de Monzón (Huesca), y utilizaban un chalet, en la provincia de Lérida, de centro de operaciones, secado y envasado de las plantas. En total han intervenido 7.870 plantas de marihuana y 107 kilos en cogollos, en la operación Templón, que se salda con 4 apresados, entre los que parece que están los dos cabecillas que comandan esta célula mafiosa albanesa, buena conocedora de Pirineos.
Ya hace unos meses, en noviembre de 2019, otra operación similar de Policía Nacional, la Copito, dieron con otro campamento y otra plantación de maría: 16 plantas (unos 3.500 kilos), cultivadas en los pinares de Agüero (Huesca) y Murillo de Gállego (Zaragoza), donde arrestaron a 6 albaneses. La situación es tan parecida que, si no fuera por las distintas ubicaciones (aunque cercanas), parecería la misma información. Nos queda claro que Pirineos les gusta a estos narcotraficantes, que reclutan a compatriotas, para que cuiden los cultivos, asentados en tiendas de campañas y conviertan áreas de especial protección natural en estercoleros, plagados de plástico, combustibles y miserias, que abandonan tras la temporada de cosecha. Cruzan la frontera francesa, con sus viejos uniformes de camuflaje y unas hachas, y se hacen su huerto clandestino, sobre tierras de alto contenido en nutrientes, por boscosas, agua gratis y el sol que luce en lo alto de los cielos. Tal vez, una mayor vigilancia de estos parajes, con dotación de nuevas tecnologías, disuada a la próxima célula de repetir tamaña barbaridad en nuestro país.
El primer vídeo, corresponde a la operación Templón; el segundo, a operación Copito y, si alguien quiere comparar, pinche en el enlace que lleva a noviembre (2019).