Cuando la patrulla de la Guardia Civil de Ayna (Albacete) prestaba servicio por su localidad, recibió el aviso de un ciudadano que informaba de que dos personas habían salido corriendo del bar que regentaba su madre, sin abonar lo consumido
Con la descripción de los dos, facilitada por el testigo, la patrulla de la Benemérita comenzó su búsqueda por las calles de la localidad, y localiza a uno de los autores oculto entre unos matorrales, después de haberse caído desde una altura de 3 metros.
Tras acceder, con dificultad, al lugar donde se encontraba esta persona se observó como sangraba por la cabeza, y presentaba heridas en brazos y piernas.
Al hospital
En la evacuación del herido participaron, además de la patrulla de la Guardia Civil, otro compañero de paisano que se encontraba por el lugar y el testigo.
El herido, que fue atendido por los servicios médicos desplazados al lugar, fue trasladado hasta el Hospital General Universitario de Albacete.
Posteriormente, se consiguió identificar al compañero del accidentado, que acudió a la zona donde se encontraban la ambulancia, para preocuparse por estado de su amigo.
La regente del bar no quiso denunciar los hechos, porque uno de los familiares de los chavales pagó las consumiciones.