Además, dentro de un arcón frigorífico fueron hallados veinte kilogramos de esta misma sustancia, en paquetes individuales de diferente peso.
Los hechos tuvieron lugar hacia las once de la mañana cuando una patrulla de la Ertzaintza de Urola Kosta, que realizaba funciones de protección ciudadana, se percató de que la puerta de un pabellón industrial se encontraba abierta.
Desde el exterior, los agentes pudieron observar que allí dentro había diferentes enseres, entre ellos, cuatro focos profesionales, tipo estudio fotográfico, y un arcón congelador. Ante la imposibilidad de que se tratara de un posible robo, y que no había nadie en las inmediaciones, con el apoyo de otra patrulla iniciaron una inspección en el interior.
Nada más acceder, se apreciaba un fuerte olor a marihuana, siendo descubiertas, tras una zona habilitada a modo de oficina, diversas dependencias acondicionadas para el cultivo de marihuana.
En esta zona se encontraban dos personas, un hombre y una mujer, las cuales indicaron que se encargaban de las tareas propias del cultivo y la vigilancia del mismo, pernoctando también en el lugar.
Poco después se presentó otro hombre, que se identificó como el responsable de la plantación y de una asociación cannabica ubicada en Pasaia.
En total fueron decomisadas más de 600 plantas y en el interior del arcón frigorífico se localizaron más de 20 kilogramos de marihuana congelada y distribuida en más de 40 envoltorios individuales de unos 300 gramos y 1 kilo de peso.
Ante estas evidencias, los tres fueron imputados como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas.