Parece que el apresado había trabajado en una empresa de suministro de material sanitario, y en sus horas de ocio ideó un plan piramidal, para llevarse cerca de 1 de euros en pocos días, ofertando mascarillas aconsejadas para prevenir el coronavirus (especialmente a la población más vulnerable), a quien quisiera comprárselas. Entre sus clientes, obtuvo un pedido por el que ingresó 180 euros, en concepto del 30% de adelanto, por la compra de 500 unidades de mascarillas Miller fft2 n95. Uno de los destinos de este material era una empresa pública, suministradora habitual de farmacias y otras empresas públicas, encargo por el que tenía previsto pagar 300 euros. De los cerca de 800 euros facturados por este individuo, de 44 años y residente en Alicante, los agentes del Grupo de Investigación de Delincuencia Económica de la Brigada de Policía Judicial de la comisaría alicantina, han localizado 350 euros, en las distintas cuentas que ha abierto para consumar su plan, que concluía con cobrar y desaparecer, sin entregar una sola mascarilla. Los agentes investigan a cuantos más ha engañado el arrestado, pero la cifra no es pequeña; podría superar el millón. En fin!, poco más que añadir y que el lector añada su opinión.
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