En la madrugada del 13 de julio se produjo una reyerta en Playa de Palma (Mallorca), entre varios grupos de personas que habían estado de marcha, a las puertas de un local de comida rápida, donde el principal agresor se puso muy violento con una joven extranjera.
Estado crítico
Al verlo, la víctima se interpuso entre ambos para que no la agrediese, momento en que el detenido aumentó su agresividad intentando golpear a todas las personas que había. El apresado le propinó un puñetazo a la víctima, un turista alemán de 30 años de edad, que cayó al suelo y se golpeó cabeza.
La víctima tuvo que ser atendida de urgencia en el Hospital de Son Espases, donde ingresó en estado muy grave, y permaneciendo en la Unidad de Cuidados Intensivos, en estado crítico.