Un paciente de Psiquiatría del hospital universitario Virgen de la Arrixaca irrumpió ayer por la mañana en la zona de Urgencias armado con una navaja y amenazando tanto al personal sanitario como a aquellos pacientes que esperaban su turno para ser atendidos.
El hombre consiguió llegar hasta el lugar de camas de urgencias, una zona restringida de esta unidad, sacó el objeto afilado y llegó incluso a ponérselo en el cuello a un auxiliar del centro.
El objetivo de este paciente era buscar a su psiquiatra, que no se encontraba trabajando ayer, y a la cual ya amenazó con matar el viernes pasado, durante la última cita médica que mantuvieron ambos. El hombre amenazaba con «ahorcarla» mientras perseguía al personal sanitario.
En el centro se produjo rápidamente una situación de pánico y alarma, hasta que los miembros de seguridad del hospital lograron reducir al agresor, confiscándole la navaja. Además, se confirma que uno de los guardias de seguridad resultó herido de carácter leve en un brazo.
Los testigos reconocen la dificultad que conllevó controlar al hombre por lo corpulento y fuerte que era, describen esta escena como una situación “terrible, con pacientes y personal médico huyendo del atacante, llegando incluso a esconderse en los baños”.
Señalan que la intención del atacante era intentar pinchar con la navaja a todo el que se cruzara en su camino, incluso rompió un cristal con la cabeza. “La situación era similar a los segundos posteriores de un atentado, decenas de personas echando a correr por los pasillos buscando un lugar donde esconderse”.
Rápidamente se desplazaron al centro hospitalario agentes de la Policía Nacional, que custodiaron al atacante, que se encuentra ya detenido y en los calabozos policiales, a la espera de pasar hoy a disposición judicial.
La psiquiatra del paciente se personó en el lugar de los hechos horas después tras conocer lo sucedido e interesarse por el estado de sus compañeros y de los pacientes que vivieron la escena.
El personal médico tiene previsto hoy formalizar las denuncias oportunas por intento de agresión a una autoridad. Al respecto, denuncian que ningún organismo actúe de oficio y represente colectivamente a los sanitarios presentes. “Ahora estamos hablando quiénes de nosotros vamos a dar nuestros nombres y apellidos para denunciar individualmente”. “Nos dijeron que quienes estuviéramos más cerca del agresor podíamos denunciar por intento de homicidio”.
Tanto el colegio oficial de Médicos como el Sindicado Médico de Murcia han condenado lo sucedido ayer en el hospital Virgen de la Arrixaca, destacando además otra agresión que tuvo lugar en la unidad Materno-Infantil del centro, donde una anestesista sufrió agresiones verbales por parte del acompañante de una paciente.