La oleada de intentos de robo en automóviles en Vicálvaro continúa. El pasado domingo, una furgoneta de color blanca apareció con uno de los cristales delanteros reventados en la calle Fuente de los Cinco Caños, justo donde se encuentra la guantera.
Otro caso de intento de robo en automóviles se registró el viernes por la noche en la calle Villajimena, algo que se está volviendo en una constante cada noche desde hace menos de un mes. En la calle Abad Juan Catalán, una de las más apartadas del callejero de Vicálvaro, también es habitual ver automóviles con las ventanas destrozadas.
Son muchas las quejas de vecinos de Vicálvaro que se han encontrado por las mañanas su coche con algún cristal roto, con las guanteras desvalijadas y con puertas entreabiertas o con claros signos de haber sido forzadas. Como demuestran los actos de delincuencia atestiguados, los ladrones no buscan robar el coche, sino objetos de valor o material que puedan hallar en su interior.
También suelen abrir los capós de los automóviles con el objetivo de robar las baterías. Ya en enero hubo una oleada de este tipo, sobre todo en la zona de la calle Gran Vía del Este, en la que abrían la parte delantera de los coches para sustraer este material. En la calle San Cipriano también se han denunciado casos de la misma índole en la comisaría de la Policía Nacional en San Blas.
Las denuncias sobre este tipo de hechos delictivos en coches se cuentan por decenas, por lo que varios vecinos de Vicálvaro ya han pedido que se refuerzen las medidas de seguridad, así como más presencia policial cuando cae la noche.