Guardias civiles, en una operación conjunta con Policía Nacional y Agencia Tributaria, han apresado en Marbella (Málaga) a los 4 presuntos narcotraficantes, todos británicos y asentados en la localidad malagueña, en el momento en que atracaban su yate en el puerto y se disponían a ir a la urbanización Guadalmina, donde residen, con 1.500 kilos de hachís, ocultos en un doble fondo de la nave. Los investigadores, que les seguían de cerca, dieron con 3 tripulantes de la embarcación arribando a tierra y, acto seguido, entrando en contacto con otros miembros del entramado, entre ellos el líder de la red, que les esperaban en un vehículo. En el momento del arresto, los agentes les intervinieron más de 100 euros.
Vivir de lujo
Las primeras pesquisas se producen cuando los investigadores descubren que una organización instalada en Marbella, dedicada al narcotráfico. Los líderes, de nacionalidad británica, disponían de un yate que utilizarían para el trasporte del hachís desde Marruecos. Identificados los cabecillas, que residían de forma permanente en la zona de Guadalmina, detectaron varios vehículos de gama alta y viviendas, aunque para sus desplazamientos usaban coches de alquiler. Los agentes constataron el alto nivel de vida que llevaban en Marbella, donde frecuentaban restaurantes y locales de ocio, y disponían de importantes cantidades de dinero en efectivo.
Movimiento
Los investigadores detectaron cómo varios miembros de la banda movían la atracada en el puerto deportivo. Posteriormente, abandonaban el lugar hacia Guadalmina. La vigilancia dio como resultado su localización cuando volvía al puerto, esta vez, con el calado más hundido de lo normal, motivo por el que se realizó un reconocimiento de la misma. Tras una minuciosa inspección, localizaron un doble fondo y en su interior 51 fardos de hachís con un peso de 1.500 kilos de hachís.