La Guardia Civil de La Rioja, en la operación Apostaxi, ha desmantelado el mayor laboratorio clandestino de cannabis sativa hallado hasta la fecha en La Rioja, que había sido instalad profesionalmente en una nave industrial de 800 metros cuadrados, ubicada en Haro. Han detenido a un hombre de 47 años, natural de Morga (Vizcaya) y vecino de Haro, e investigado a otro de 40 años, natural de Baracaldo y vecino de Portugalete (Vizcaya), como presuntos autores de un delito contra la salud pública por cultivo de droga y, adicionalmente, por defraudación del fluido eléctrico. Han intervenido 2.765 plantas de marihuana abarrotadas de cogollos, que arrojaron un peso 212,39 kilos, con un valor de más de 107€.
Más THC
Las plantas estaban tratadas genéticamente, para obtener un THC más potente y 5 cosechas al año, 2 más de lo habitual en cultivos de interior. Con cada cosecha se podía llegar a alcanzar un beneficio en bruto de 250 €, 1. 250 € al año.
Enganche a la red
El laboratorio necesitaba un elevado consumo de luz, motivo por el que el detenido había practicado un enganche ilegal a la red eléctrica del polígono industrial, para maximizar beneficios y minimizar costes de producción, ascendiendo la cantidad de fluido eléctrico defraudado a 30€.
Operación Apostaxi
A mediados de abril, agentes del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil en La Rioja, sospechan de que en una nave industrial del polígono Fuenteciega de la localidad de Haro, se producía marihuana de manera industrial y en cantidades suficientes como para abastecer a toda la provincia de La Rioja y a diversas comunidades limítrofes. Una vez localizada la nave, constatan las medidas de seguridad para hacerla prácticamente inexpugnable, incluyendo además sistemas de opacidad para impedir reconocimientos visuales desde el exterior que delaten la actividad.
Sin actividad
Con el transcurso de las semanas los dispositivos de seguridad desplegados en la zona, en los que colabora el Equipo de Policía Judicial de La Guardia Civil en Haro, permiten verificar que pese a ser una nave industrial, no registra ningún tipo de actividad comercial, accediendo únicamente al interior y a diferentes horas del día y de la noche, la persona que la había alquilado y un amigo, ambos conocidos de los investigadores por diversos hechos delincuenciales.
Conato de incendio
En la mañana del jueves, 23 de mayo, los agentes constatan un conato de incendio en el interior de la nave, por lo que solicitan a la autoridad judicial un mandamiento de entrada y registro, procediendo al despliegue de un discreto dispositivo en la ciudad de Haro, para evitar que el objetivo principal huya de la localidad al enterarse del siniestro.
82 € de inversión
Entraron en la nave y se descubrieron un complejo laboratorio indoor, de 30 metros de largo por 10 de ancho, dividido en cuatro partes y dotado con lo último en sistemas de cultivo y tecnología domótica, para acelerar el crecimiento y floración, con una inversión en su montaje e instalación de 82€.
Riego por goteo
La instalación contaba con 12 depósitos de 1 litros de agua, para el riego por goteo, bombas de superficie, aparatos industriales de aire acondicionado y filtros de carbono para depurar el olor, además de un avanzado sistema de iluminación con cientos de lámparas de alta potencia de 600 y 1.200 watts, control de fotometría, temperatura, humedad, medidores de ph y gran cantidad de abono y fertilizantes para el desarrollo y floración de las plantas.
Libertad con cargos
Una vez fue detenido el responsable de la instalación se llevó a cabo el registro de su vivienda, en la que se intervinieron efectos y documentación que ha sido sometida a análisis y estudio durante estos meses. Posteriormente se actuó contra el investigado. Ambas personas, tras ser puestas a disposición de la autoridad judicial, quedaron en libertad con cargos, con la obligación de comparecer ante el juez cuando sean citados.