El 20 de marzo, la Guardia Civil de Arévalo, tiene conocimiento, a través de la denuncia presentada por la propietaria, de que le han robado en unos almacenes de cosméticos y otros de bebidas, ubicados en Arévalo.
Los autores entraron a los almacenes practicando un butrón en una pared lateral del almacén, para llevarse diversidad de artículos de primera necesidad, valorados en unos 25 euros, que abandonaron al ver a los guardias llegar al lugar.
La investigación lleva a los guardias a localizarles, dos días después, en una población madrileña, donde los dos hombres han sido arrestados.