Policía Nacional ha liderado un equipo de investigación formado por cuerpos policiales de España, Reino Unido y Dinamarca, además de Europol, dirigido contra la distribución de señal ilícita a través de IPTV. Durante el operativo se realizaron 14 registros simultáneos: 8 en España (Málaga, Madrid y Alicante), 4 en Dinamarca y 2 en Reino Unido; y finalizó con la detención de 5 personas, 3 en España, que han ingresado en prisión.
En la mayor operación realizada hasta la fecha en Europa contra este delito, se ha puesto fin a una infraestructura tecnológica internacional muy compleja, compuesta por 11 ‘granjas’ de servidores distribuidas por todo el mundo, algunas de ellas con más de 44 servidores. Una de las principales características de este ciberdelito es la alta rentabilidad. En el caso de esta operación se ha calculado que habrían obtenido un beneficio de unos 8 de euros. Además, desde 2013, han estado desviando más de 1.600 euros a sociedades ubicadas en el extranjero.
Los arrestados residían en urbanizaciones de lujo en la costa malagueña, usando vehículos de alta gama que continuamente renovaban. De hecho, en el operativo se intervinieron 12 vehículos, además de bloquear cuentas bancarias y bienes inmuebles.
La investigación se inició a finales de 2015, tras la denuncia presentada por la Premier League por un delito contra la propiedad intelectual, llevado a cabo por una web radicada en Málaga, que ofrecía suscripciones de IPTV con acceso a multitud de canales internacionales. Los agentes constataron la gran envergadura de la actividad al comercializar, presuntamente, servicios de abono a suscripciones de IPTV, que permitían el acceso al visionado de más de 800 canales televisivos, a un repositorio de obras audiovisuales protegidas y a un listado de emisoras de radios extranjeras.
Se comprobó la existencia de 10 suscripciones categorizadas por el país de origen de los canales, lo que implicaba que la infraestructura necesaria para la interceptación y distribución debía de ser de especial relevancia. El precio de las suscripciones variaba no solo por el, sino por el tiempo de abono y oscilaba de los 40 a los 460 euros mensuales. A pesar de que las titulares del negocio eran sociedades españolas, el pago de las suscripciones se tenía que hacer a una sociedad gibraltareña.
La página web denunciada había asociados varios perfiles en redes sociales, promocionando sus servicios para obtener mayor clientela. Además, no solo se estaba cometiendo el delito a través de la página denunciada, sino que existía cerca de 20 de ellas. Detrás había un entramado societario y de páginas web coordinado por una organización internacional con ramificaciones en España, Dinamarca, Reino Unido, Letonia, Países Bajos y Chipre.
Se han hecho 14 registros simultáneos: 8 en España (Málaga, Madrid y Alicante), 4 en Dinamarca y 2 en Reino Unido. Se procedió a la desconexión de 66 servidores que en esos momentos estaban siendo utilizados y se detectó e identificó al resto de servidores. Por los datos que se tienen hasta el momento, se sabe que forman una red de 11 ‘granjas’ de servidores. El dispositivo finalizó con la detención de cinco personas y la toma de declaración como testigos de otras diez. Los tres detenidos en España, una vez puestos a disposición del juzgado, ingresaron en prisión.