La Guardia Civil de Huelva y Cádiz ha tenido que contar con el apoyo de compañeros desplazados desde Madrid y Sevilla, y una Oficina Móvil de EUROPOL, para detener a 16 marroquís, afincados en Huelva y Moguer, dedicados a traer migrantes ilegales a España, a través de las costas andaluzas.
Con los métodos tradicionales que emplean estas mafias, principalmente usando a las personas como ‘cosas’ que les generan beneficios, los detenidos cobraban 1.200 euros por cada uno que se montaba en las lanchas neumáticas, embarcaciones o pateras en Marruecos, y desembarcaba en algún puerto del sur español.
En la nave, además de hacinar a los ‘pasajeros’ que pagan primera clase por jugarse la vida ‘como sardinas en lata’, colocan unos alijos de hachís, que suman rentas a la mafia, casi siempre formada por patriotas y compatriotas de mucho rezo. Solo nos falta saber si éstos mafiosos asentados en el Al-Ándalus, cobran ayudas de los españoles, amparados en el socorro social.
Con o sin ayudas, a los 16 ‘pollos’ apresados se les han incautado, en los seis registros hechos por los agentes, 16.435 euros (con posibilidad de tener más ‘pelas’ escondidas’), 17 teléfonos móviles, coches, ordenadores y 132 kilos de hachís. Se les calcula unos beneficios de 350 euros (libres de impuestos).
Barbate
La Guardia Civil cuenta que la investigación comenzó en octubre, de 2016, a raíz la llegada de varias pateras, con inmigrantes irregulares a la costa de Barbate. Se han acreditado al menos 8 desembarcos, en embarcaciones neumáticas, semirrígidas y pateras, con entre 30 y 45 personas cada una, con lugar de desembarco en algún puerto de la costa de Andalucía.
Localizados 65 migrantes
Estos viajes se hacen en condiciones de mala mar y sin medidas de seguridad, por lo que la vida de estos migrantes estaba expuesta a riesgo. El ‘billete’ a España les cuesta 1.200 euros, que pagan a los mafiosos. Al llegar a territorio español, la banda les quita sus móviles y enseres personales y los trasladaba a localidades de Huelva así o a otras provincias.
Retenido en estas localidades, extorsionan a las familias de los trasladados a abonar entre 350 y 700, para conseguir su liberación.
Se estima que esta mafia ha trasladado de forma irregular, en un año, a unas 300 personas, entre ellos, algunos menores de edad, con unos beneficios que alcanzan los 350 euros. De los 300, se han localizado a 65 inmigrantes irregulares, incluidos 16 menores.