Agentes de la Policía Nacional, con la colaboración de la Policía Local de Meco (Madrid), han desmantelado un criadero ilegal de chihuahuas, en una vivienda de esa localidad madrileña. La investigación se inició en enero, tras recibir una denuncia anónima que alertaba del riesgo al que estaban sometidos los perros, y de las molestias ocasionadas a los vecinos por los ruidos y los olores.
En el inmueble había numerosos animales encerrados y el domicilio carecía de autorización de núcleo zoológico. Al saberse investigados intentaron sacar a los perros, momento en el que se procedió a la intervención de los 12 animales, todos chihuahua, y 6 trasportines en cuyo interior estaban los 12 perros, y diecisiete jaulas de transporte de animales.
Los agentes constataron que tenían una página web y varios perfiles en redes sociales, donde ofertaban los animales y los complementos para su cuidado. Afirmaban que tenían una experiencia de más de 20 años en la cría familiar de este tipo de animales. En estos momentos, la investigación sigue abierta por un delito continuado de maltrato animal.
Los perros han sido trasladados hasta una protectora de animales donde han sido bautizados con los nombres de Starski, Hutch, Sabrina, Jill, Kelly, Everest, Beckett, Scully, Wilows, Clarise y Sophie, todos nombres relacionados con la Policía, en homenaje a sus salvadores.