Hay 3 apresados, 2 en Ávila y el jefe de ésta célula de la mafia rumana en su país, a través de una orden internacional. Éste individuo proporcionó a los responsables de un club de alterne abulense, a una niña rumana de 18 años, con discapacidad, para que la prostituyeran en su negocio. La joven fue traída a España con la promesa de lover boy, de ser pareja y contraer matrimonio con el que resultó ser un proxeneta, de 44 años.
Los agentes de Policía Nacional han logrado dar con esta célula y liberar a la joven, siempre bajo la vigilancia de la sobrina del cabecilla rumano, que acompañaba a la víctima y actuaba como su controladora, y con el encargado del club en el que era explotada, que sometía a la joven a continuas amenazas contra ella y sus familiares. La joven proporcionaba unos beneficios de 6 euros al mes.