Los investigadores atribuyen al grupo una serie de asaltos a industrias de diferente índole ubicadas en localidades guipuzcoanas como Idiazabal, Zaldibia, Oiartzun, Errenteria, Elgoibar, Asteasu, Ibarra, Tolosa, Zestoa, entre otros y de otros lugares, como Zamudio y Mallabia, en Bizkaia y Agurain, en Álava.
Las investigaciones practicadas permitieron la identificación de sus componentes, todos ellos hombres originarios del Este de Europa, así como la localización de tres vehículos utilizados por el grupo. Estos hombres se encontraban residiendo, desde la llegada procedentes de la provincia de Alicante, en diferentes puntos de Donosti, especialmente del barrio de Amara.
Así, se pudo saber, que previamente a su desplazamiento a la Comunidad Autónoma de Euskadi, dos de los miembros del grupo estaban siendo investigados a su vez por la Policía Judicial de la Guardia Civil de Alicante y Murcia, por hechos similares cometidos en diferentes lugares de la Costa Mediterránea.
Las vigilancias y seguimientos realizados por la Ertzaintza permitieron establecer la existencia de pequeños "zulos" utilizados por el grupo para la ocultación de diversos tipos de herramientas y efectos (mazas, hachas, cortafríos, palanquetas, amoladoras, discos abrasivos) utilizados en la comisión de los robos.
Estos escondrijos se ubicaban en varios puntos de una zona boscosa del barrio de Sorabilla, de la localidad de Andoain, Gipuzkoa, lugar al que acudían los delincuentes antes y después de la comisión de los asaltos.
En dicho lugar fueron localizados también tres terminales de telefonía que habían sido sustraídos el 22 de noviembre del interior de una empresa sita en el Polígono Goitondo de la localidad de Mallabia, Bizkaia.
Tras la localización de estos efectos, se diseñó el pertinente dispositivo para la detención de los integrantes del grupo. El dispositivo se desarrolló en la localidad de Andoain, donde la Ertzaintza detuvo a seis de sus componentes cuando viajaban a bordo de dos vehículos de las marcas Hyundai y Audi.
Los vehículos interceptados se disponían a acceder a la N-1 procedentes del barrio de Sorabilla, a donde se habían desplazado tras cometer un robo en una empresa ubicada en la localidad alavesa de Agurain.
En los vehículos, que han sido intervenidos, fueron localizados cinco equipos transmisores-receptores portátiles, herramientas, dinero, ropa y calzado, para cambiarse tras cometer los robos.
Dos de los walkie-talkie, uno en cada vehículo, estaban operativos e interconectados entre sí.
A los detenidos les fueron ocupados diferentes documentos de identidad falsos. Además, sobre uno de ellos pesaba una orden de detención de un Juzgado de lo Penal de Donosti y otro de ellos, tenía prohibida su entrada en el país hasta 2025, a raíz de la comisión de diferentes delitos.
Durante la jornada del dispositivo fueron registradas dos viviendas en la capital donostiarra. La Ertzaintza está tratando de localizar al séptimo componente del grupo, ya identificado, para proceder a su detención.
Los seis detenidos tienen entre 36 y 52 años, cuatro de ellos son serbios, uno albanés y el último, esloveno. Cuatro de los arrestados cuentan con numerosos antecedentes por delitos contra la propiedad.
Tras la puesta a disposición judicial de los detenidos, el titular del Juzgado de Instrucción nº 2 de Eibar, decretó la puesta en libertad provisional de todos ellos, previa retirada de sus pasaportes y con la obligación de personarse quincenalmente en sede judicial, ya que la Fiscalía no había solicitado la prisión provisional de ninguno de los detenidos.