Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Agencia Antidroga Americana (DEA), que ha contado con la colaboración de la Armada Española, han interceptado una embarcación que ocultaba cerca de 1.400 kilos de cocaína. El remolcador, de nombre Breath, navegaba por el Atlántico desde inicios de octubre y ha sido asaltado por el GEO a 980 millas náuticas de las Islas Canarias. Los 10 tripulantes de nacionalidades turca, ucraniana, georgiana y búlgara han sido arrestados por tráfico de estupefacientes.
Los agentes supieron que una embarcación que atravesaba el Atlántico podría transportar un cargamento de droga. El remolcador había partido de Turquía, con rumbo a Sudamérica, frente a cuyas costas alijó en alta mar, sin llegar a entrar en ningún puerto y teniendo como destino final España.
Con la autorización de las autoridades de República de Moldavia, país de pabellón del remolcador, un equipo de asalto del GEO de la Policía Nacional abordó la embarcación, con la colaboración de la Armada Española que fletó una embarcación para el transporte de los agentes hasta alta mar.
Hallaron en la cubierta del navío numerosos paquetes de cocaína envueltos en tela de rafia, de más de 30 kilos cada uno. Los fardos estaban atados entre sí, preparados para arrojar al mar en caso de urgencia.