Parece que este vecino de Paloma (Badajoz), investigado por agentes del SEPRONA de Hornachos, por capturar 60 galápagos leproso en el río Palomillas, se había hecho unas construcciones para sus 200 ovejas, cerdos y gallinas, que convivían, probablemente sin saberlo, con las torturas que acumulaba en un estanque.
El paisano, poco a poco, ha construido con maderas, chapas y uralitas las cuadras para su ganadería, en terreno del dominio público hidráulico, vallado en todo su perímetro y utilizado con fines agroganaderos.
Además, pescaba en el río Palomillas los galápagos, y tras su captura y cautividad, tenía pensado comérselos. El galápago leproso (mauremys leprosa), es una especie protegida.