Según parece, el altercado se produjo durante una discusión por motivos labores, donde el responsable del bar terminó por sacar una pistola de aire comprimido con la que amenazó a la empleada.
La mujer atemorizada salió del bar corriendo. Varias patrullas de la Ertzaintza se desplazaron a la zona y ante la vista de los hechos, procedieron a detener al hombre por un presunto delito de amenazas.