Policía Nacional y Guardia Civil, en la operación ‘Azrael-Traveling’, han desarticulado una organización ‘dedicada al tráfico de drogas, por vía marítima, que actuaba desde la desembocadura del Guadalquivir. Se ha detenido a 17 personas y se han aprehendido 2.200 kilos de hachís. Además, se han intervenido 2 barcos de pesca, 1 embarcación de recreo, 4 vehículos tipo turismo, 1 camión frigorífico, gran cantidad de dinero en efectivo y documentación, que se investiga por blanqueo de capitales.
Los arrestados utilizaban barcos de pesca arrastreros, para traer la droga hasta el muelle gaditano de Bonanza. Tal era la capacidad operativa que, en poco tiempo, llegaron a comprar un barco de mayores dimensiones, para aumentar el volumen de carga.
En alta mar
En junio del pasado año, la policía identificó a un grupo de personas que podrían dedicarse al tráfico de hachís a gran escala y que utilizarían un barco de los denominados arrastreros, con base en el muelle pesquero de Sanlúcar de Barrameda, para introducir de grandes cantidades de estupefaciente.
Guardias civiles y policías nacionales optaron por una investigación conjunta, con la que se llegó a determinar el rol que cada sospechoso desempeñaba en la organización, sus domicilios, vehículos, lugares utilizados como “guarderías” para la droga y toda su estructura.
Los sospechosos recogían la droga en alta mar, cuando salían a faenar, y regresaban al muelle de Bonanza, tras su jornada de pesca. El resto, se quedaban en tierra, en la contra vigilancia, para que en el muelle no hubiese nadie que les descubriera.
Cádiz, Sevilla, Málaga, Ceuta y Huelva
Atracado el barco en el muelle, un camión frigorífico se acercaba y comenzaba la descarga: 80 fardos de hachís envueltos en sacos de arpillera, que pasaban del arrastrero al camión por casi una decena de porteadores. El camión se dirigía a las ‘guarderías’ que la organización tenía alquiladas en Chiclana de la Frontera, concretamente un garaje y una casa de campo, provistos de servicios de seguridad y custodia.
Avanzada la investigación se apresó a los 17 miembros de la organización en Cádiz, Sevilla, Málaga, Ceuta y Huelva, a la vez que se practicaron cuatro entradas y registros simultáneos en estas provincias.
Paralelamente, se organizaba un dispositivo por mar y aire que permitió la incautación de los barcos de pesca en alta mar mientras faenaban, así como las detenciones de todos sus tripulantes. Las capturas de pescado del día que llevaban a bordo en el momento del asalto fueron entregadas en el Banco de Alimentos de Cádiz.
