Desde 2015, año en el que el Ministerio del Interior elevó a 4 el Nivel de Alerta Antiterrorista (NAA), las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han detenido a 187 terroristas yihadistas.
Ayer, agentes del Servicio de Información de la Guardia Civil, bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción, Número 2, y la Fiscalía de la Audiencia Nacional, han detenido, en Bilbao, a un ciudadano argelino, S.M., de 44 años, por su vinculación con el grupo terrorista DAESH.
El detenido ya había dado muestras de su radicalidad y se le había relacionado con actividades de financiación y apoyo logístico, mediante el envío de fondos y la falsificación de documentos de identidad, en beneficio de Al Qaeda. Lejos de rectificar, su proceso de radicalización se había agravado en los últimos meses, incurriendo en un retraimiento social casi total, con muy contadas salidas de su domicilio.
Su actividad en Internet era especialmente intensa y se desarrollaba a través de una maraña de perfiles de Facebook , para difundir los contenidos de productoras mediáticas vinculadas al DAESH, algunos de ellos de contenido extremadamente violento.
Muerte a los `perros’
Entre los contenidos propagandísticos, son especialmente abundantes aquellos que ensalzan el martirio y los que justifican la muerte de los infieles, a los que se refiere como “perros”. Buena parte de este contenido es de difícil acceso en la red, algo que evidencia un buen conocimiento de las redes de producción y distribución del aparato mediático del DAESH.
Entre los contactos del detenido, que desarrollaba una intensa actividad en redes sociales, aparecen delincuentes relacionados con el narcotráfico y otros investigados por terrorismo en países de la Unión Europea.
Dada la intensa actividad que el detenido desarrollaba en redes sociales, especialmente a través de Facebook, el principal interés de los investigadores se centra en conocer su red de contactos, tanto en nuestro país como en otros países europeos y en zonas de conflicto, que permitan esclarecer sus intenciones y abrir nuevas líneas de investigación. El análisis de los dispositivos electrónicos que utilizaba para conectarse a Internet y para almacenar los contenidos que difundía, permitirá avanzar en esta tarea.