La falsa denuncia de un empleado para ocultar a su jefe que se había llevado la furgoneta del curro, había contratado los servicios de una prostituta y, cuando llegaron a una zona apartada, las ruedas se hundieron en el barro y el vehículo estaba asquerosamente sucio.
Vaya historia
Pues bien, esta falsa denuncia, ha llevado a los policías nacionales del Grupo I de Investigación de la Comisaría de Elche, a analizar todas y cada una de las huellas y fluidos encontrados en el interior de la furgo, porque la historia del denunciante, no cuadraba.
Una de ‘vaqueros’
Según él, cuando estaba de reparto por Elche, parado en un semáforo en rojo, dos individuos con aspecto de drogadictos, se metieron en el coche, en el asiento del copiloto. Uno de ellos le sacó un objeto punzante y le obligó a un ir a un descampado, conminándole para que le diera el dinero. Metido en el barrizal y como no llevaba un chavo, los asaltantes se fueron.
Toda una señora
Mientras tanto, hete aquí, que las huellas corresponden con las de una trabajadora del sexo, toda una señora, que en Comisaría contó la verdad de lo sucedido. El que se metió en todo este lío, es un hombre de 51 años, detenido, llevado ante el juez y en libertad con cargos.
