Ha caído una célula de la mafia búlgara, instalada en Madrid desde hace, al menos, un año. Se asentaron en la capital para okupar pisos vacíos de los bancos, en distintos barrios. Desde su central de operaciones, viajaban a su país, Bulgaria, a comprar niñas que sus padres venden al precio pactado y firman la autorización para el viaje a España u otro país de Europa.
Casadas y prostitutas
Aquí, las niñas son obligadas a casarse con sus captores y a dedicarse a la prostitución, cuando no están robando en comercios, calles, naves y casas. Hacinadas en los pisos y sin conocer el idioma, están a merced de sus dueños. Ellos van con frecuencia a la madre patria, a por más víctimas y a vender sus botines españoles, a calco de la mafia homóloga rumana.
13 años
En esta operación, los policías nacionales han liberado a 14 niñas, 12 de ellas menores y una de 13 años, y han apresado a 41 mafiosos proxenetas y ladrones. En los registros practicados se han localizado las autorizaciones de viaje firmadas por los padres de las niñas, para que viajaran desde Bulgaria a España; aparatos electrónicos, objetos de valor y joyas de oro procedente de robos.
Dinero
También se ha intervenido una gran cantidad de dinero, además de 28 documentos de identidad de diferentes nacionalidades. Gracias a la desarticulación del grupo criminal, se han podido esclarecer más de 150 delitos relacionados con la actividad de esta red.