El viaje comenzó en Nigeria, su país natal, donde la mafia de trata de seres humanos tiene su sede y capta a jóvenes en los barrios más marginales, con la promesa de traerlas a Europa, donde tendrán un trabajo remunerado con el que podrán pagar los 35 euros de deuda que contraen, como pago por el viaje, el acompañamiento y la documentación falsa, con la que traspasan fronteras.
Hacia Níger
Una de las dos mujeres ahora liberadas, ha narrado a los agentes de la Policía Nacional que, desde Nigeria cruzaron hacia Níger, un país extremadamente pobre; y de ahí, hasta Libia, ese territorio destrozado por las guerras internas y externas que, por su salida al Mediterráneo, se ha convertido en la costa donde aguardan miles de migrantes, a la espera de conseguir una patera que les acerque a Italia.
Camino conocido
La mafia nigeriana de la prostitución y tráfico de drogas, conoce bien esta ruta que recorren cada semana con nuevas víctimas y donde no encuentran ningún obstáculo en su camino. Un trayecto en el que las jóvenes, muchas veces menores de edad, son ofrecidas a los policías fronterizos, como pago por permitir su pase, a sabiendas de quiénes son los mafiosos, las penosas condiciones de las chicas en el recorrido y su destino final.
Muertas
La denunciante, ha contado que varias de las chicas con las que iba murieron durante el trayecto y otras fueron asesinadas, cuando se resistían a mantener relaciones sexuales con sus captores. Las condiciones en las que las supervivientes llegaron a Libia, fueron terroríficas.
En las costa libia
Una vez en la costa esperaron el momento de embarcar hacia Italia. Durante ese tiempo, ella fue agredida sexualmente en varias ocasiones y fue testigo de cómo algunas compañeras eran asesinadas.
Una patera con 150
Cuando llegó la patera de los proxenetas, reunieron a unas 150 personas, en su mayoría mujeres, y las echaron al mar sin sistemas de navegabilidad ni seguridad. En este caso, la víctima que relata su periplo no llegó a Italia hasta un segundo intento, ya que en su primer viaje la embarcación naufragó y, al menos, una persona falleció.
Segundo intento
En este segundo intento, la embarcación fue localizada por las patrullas italianas, quienes condujeron a todos a un centro de refugiados. La mafia nigeriana cuenta con células en este país, perfectamente adiestradas y que saben cómo sacar a las jóvenes de estos campos, previo pago y con falsa identidad.
A Milán
La víctima fue llevada a una casa en Milán, hasta que el jefe de la organización la recogió y la trajo a España, a su domicilio de Benidorm, donde fue violada en decenas de ocasiones por él, además de prostituirse en un club de Alicante. Cuando se quedó embarazada fue obligada a abortar. La segunda de las mujeres liberadas abortó hasta en 5 ocasiones.
4 detenidos
Cuando la denunciante acudió a una ONG alicantina para explicar su situación, los agentes comenzaron la investigación, a través de los datos que ofrecía la mujer, quien dijo desconocer la identidad de sus captores. Aún así, los policías han dado con 4 miembros de esta célula nigeriana, dos de ellos en Benidorm, incluido el feje, otro en Pamplona y un cuarto que operaba desde Palma de Mallorca.
