Agentes de la Policía Nacional, en colaboración con la Inspección del Servicio de Seguridad Alimentaria de la Consellería de Salud del Govern Balear, han llevado a cabo una operación en una empresa de distribución de carne en Mallorca, con sede en un polígono de Santa Ponsa (Calvià), en la que se ha detenido a los 4 miembros de la misma familia que la regentan.
Cinco inspecciones
La Consellería había realizado 5 inspecciones en la empresa, desde diciembre, donde los inspectores detectaron elaboración y distribución de productos sin autorización, como carne despiezada y hamburguesas; gran cantidad de productos caducados, y carne fresca y congelada sin etiqueta; productos con etiquetas de proveedor eliminadas y una etiqueta propia con fechas y registros falsificados.
Destruir la carne
Fruto de dichas inspecciones se establecieron varias medidas cautelares, como la inmovilización de más de 2 kilos de género que tenían que destruir, e intervención de medios como la máquina de vacío y etiquetadora, prohibición de actividades, propuesta de suspensión e inicio de expediente sancionador.
Operación Pork
En la mañana del martes se inició la operación Pork, en la que participaron agentes de la Policía Nacional e inspectores de sanidad, quienes localizaron nuevamente género caducado, en algún caso desde 2016.
Maltrato laboral
Además, las declaraciones de trabajadores de la empresa evidenciaron el abuso laboral al que les sometían, con 84 horas semanales de trabajo por 1 y 1.200 euros mensuales, sin derecho a vacaciones o limitadas. Dentro de los testimonios recogidos se dejaba entrever que existían serias deficiencias higiénicas.