Le dan a todos los palos del delito y se llevan el Código Penal de calle. La mafia de los ghaneses unida a la de los nigerianos, asoma con fuerza en la falsificación de todo tipo de documentos, con unas tarifas que, en este caso, pagan sus compatriotas en situación irregular.
En esta ocasión, la investigación de la Policía Nacional y los Mossos d´ Escuadra, han puesto ante el juez a 46 individuos, entre mafiosos ghaneses, sus colaboradores nigerianos y los clientes de estos países de África occidental, que quieren legalizarse en España, sin conocer el idioma, estudiar y de forma exprés.
A cambio de 2 euros, un suplantador de identidad va al examen de conducir con un documento falsificado, excepto cuando aspirante y usurpador tienen rasgos físicos similares. El hacerse con el permiso para circular por Europa está en lo más alto de la tarifa, que en su oferta incluye el pasaporte español, por 600 euros, 300 por el permiso de residencia o 150 euros por certificados de nacimiento, penales, sellos para legalizaciones… En fin documentos a la ‘carta’, para quien los pague.
Al frente de la organización, con infraestructura por todo el territorio, se encontraba un ghanés, que tenía como lugarteniente a un nigeriano experto falsificador, a la vez contaban con intermediarios para buscar nuevos clientes y llevar los documentos falsificados.
Tras analizar todos los datos, los agentes han registrado 6 inmuebles: 4 en Madrid y 2 en Barcelona. La investigación, que comenzó en 2016 y continúa abierta, se ha saldado hasta el momento con la detención de 46 personas en Madrid (10), Barcelona (16), Murcia (2), Logroño (2), Vizcaya (3), Zaragoza (7), Burgos (2), Alicante (1), Las Palmas (1), Almería (1) y Lleida (1).
El desmantelamiento de esta red tiene especial relevancia para la seguridad vial, para evitar que se pongan al volante personas que desconocen las normas de tráfico.