Desde 2015 se calcula que han falsificado 400 recetas, a través del robo de talonarios en un consultorio médico de Granada, al que le aplicaban un sello falso, para colarlas en farmacias de esta provincia, Jaén, Málaga y Almería, y después vender los medicamentos a deportistas de fitness y culturismo.
El cabecilla se había hecho con una red de delincuentes comunes a los que enviaba a comprar los fármacos, por una comisión, o a robar talonarios de recetas, a 400 euros cada uno. Para ampliar el ‘negocio’ consiguió que algún farmacéutico dispensara medicamentos que estaban sujetos a un control más riguroso que la simple receta, como los específicos para mujeres menopaúsicas, que incluso podían ir a nombre de hombres, o recetas en las que la posología era muy superior a la preceptiva.
En esta operación de la Guardia Civil hay 10 detenidos y otros 41 investigados, a los que se les considera autores de delitos contra la salud pública, falsedad documental, estafa al Servicio Andaluz de Salud y hurto. Entre ellos hay 4 menores de edad, farmacéuticos titulares, y adjuntos y técnicos de las farmacias en las que se abastecían.
Se han realizado dos registros en los domicilios del cabecilla de la organización, donde se ha intervenido 1.336 dosis de diferentes medicamentos como Testex prolongatum, Provirón, Winstrol, Femara, Decadurabolin, Arimidex, femara, Gonal y Trakimazin.