El 27 de octubre de 2017 pasará a la historia como el segundo gran ataque frontal contra las instituciones legales y democráticas de España. Tras consumarse la declaración de independencia ilegal y antidemocrática, por parte del gobierno independentista catalán, las instituciones democráticas españolas, se enfrentarán a su segundo gran reto histórico, tras el golpe de estado fallido de 1981.
En aquel momento la joven democracia española, tuvo que afrontar un golpe frontal a la democracia, que gracias a la fuerza y a la determinación de los demócratas, se logró desarticular. España iniciaba un camino de 40 años de convivencia, libertad y progreso, tras haber superado casi 40 años de dictadura Franquista.
Ahora la democracia de este país, tiene que volver a enfrentarse a otro golpe contras las instituciones españolas. El acto ilegal y antidemocrático cometido por parte del gobierno independentista catalán, no solo supone un ataque contra la Constitución española de 1978, también es una violación de las leyes catalanas, del Estatuto de Autonomía y del autogobierno que con tanto sacrificio lograron sacar adelante todos los catalanes, de la mano del resto de españoles.
Ante este ataque de los secesionistas contra la mayoría de los catalanes y del resto de españoles, la democracia y el estado de derecho español, tiene que responder con firmeza y determinación a través de los principios legales y democráticos de la Constitución de 1978, que hoy más que nunca hay que poner en valor, y que propiciará que la democracia española salga fortalecida.