Desde la elección como presidente del PP, de Pablo Casado, y la continua utilización política que realiza el líder de Ciudadanos del tema catalán, se está produciendo una agudización en la deriva hacia la extrema derecha, de ambas formaciones conservadoras.
Podemos encontrar numerosos ejemplos que ponen de manifiesto esta deriva extremista de PP y de Ciudadanos. Con respecto al PP, es cierto que de forma tradicional ha abarcado una parte importante de simpatizantes de extrema derecha que le dan su respaldo en las elecciones, pero desde la elección como presidente del partido, de Pablo Casado, y sus posicionamientos ideológicos en distintos temas sociales, ha provocado la profundización de ese camino hacia la extrema derecha.
A esto hay que sumar, el discurso reaccionario que se desprende del líder popular y su línea radical con respecto a la compleja cuestión catalana.
LA COMPETICIÓN POR LA EXTREMA DERECHA DE PP Y CIUDADANOS
En lo que tiene que ver con el partido Ciudadanos, desde la elección de Casado en el PP, se ha producido una evidente batalla por la derechización de ambas formaciones, profundizada por la deriva de Albert Rivera.
Es más que llamativo los distintos viajes ideológicos por los que ha ido pasando Ciudadanos; si eran o no eran socialdemócratas, liberales, consevadores, progresistas... A esto se añade los continuos cambios en el programa electoral en función de como sopla el viento en la ciudadanía.
Con la cuestión catalana en el primer plano, la formación naranja trató de mostrar una imagen de falsa transversalidad ideológica, ante los negativos acontecimientos que se estaban produciendo en Cataluña, y la falta de relato claro de las formaciones progresistas.
LA REALIDAD DE CIUDADANOS, TOCA LA EXTREMA DERECHA
De un tiempo a esta parte, una buena parte de la ciudadanía se está dando cuenta de la verdadera realidad ideológica de Ciudadanos, que es la de der un partido muy de derechas. Y esto se pone de manifiesto en la visión reaccionaria que tienen de numerosas cuestiones sociales, muy coincidentes en hacernos retroceder varias décadas, como sucede con el PP.
También el discurso radical de Albert Rivera sobre la cuestión catalana, pasando a estar todos los días aplicando el artículo 155 en Cataluña, aunque no se cometan hechos jurídicos que provocarían esa aplicación. Además Ciudadanos está utilizando el tema catalán para enfrentar territorios y de esta forma está impidiendo poder articular vías de solución y diálogo entre Gobierno y Generalitat.
Es importante que la ciudadanía tome nota, y no se deje arrastrar por partidos que tocan la extrema derecha, y que en Europa elección tras elección le siguen ganando terreno a las formaciones progresistas.