El siglo XXI es una etapa en la que parece que tenemos que ser profesionales de todo, controlar todas las áreas e incluso abarcar diferentes temas que son demasiado específicos. Problemas legales, económico-financieros o de otro tipo… En estos aspectos necesitamos a alguien que nos aconseje y, si queremos tener el mejor servicio, debemos pedir un presupuesto asesoría de cara a contratar a buenos profesionales y ver cuál es el que más encaja con nuestro perfil.
No creas que tener a un asesor es cosa de empresarios o de gente con un negocio. Todos podemos requerir de sus servicios en algún momento por diferentes motivos, pero no todos estamos al mismo nivel y hay cantidades a la que parte de la población no puede acceder, por lo que es aconsejable que consultemos precio asesoría para no encontrarnos sorpresas posteriores a los servicios que solicitamos.
¿Por qué solicitar los servicios de una asesoría?
Tienes muchas ventajas a la hora de solicitar ayuda a un asesor. Por ejemplo: tendrás en tu mano el acceso al conjunto de la normativa vigente indispensable por parte de tu nuevo fichaje, que te pondrá al corriente de todas las normas que debes cumplir como empresa o individuo particular y las ayudas o recursos de los que dispones. Esto, muchas veces, pasa desapercibido porque el usuario no sabe que puede gozar de unas ventajas o servicios puestos a su disposición.
Además, los asesores te pueden ayudar en los temas de impuestos, pago de salarios, IRPF de trabajadores, liquidaciones trimestrales del IVA, declaraciones del Impuesto de Sociedades, elaboración de presupuestos… En el caso de una empresa grande o, si eres un particular, en otros temas económicos y jurídicos de calado.
También recibirás un trato cercano y personalizado, fundamental para que te informen de todo lo que debes hacer para estar al día fiscal y legalmente. Con un trato especializado, podrás hacer frente a todos tus problemas con otro talante. Además, con este asesor de tu lado, podrás ahorrar tiempo y esfuerzo a la hora de abarcar todos estos problemas que pueden surgir. Incluso las asesorías están a la última en todo a lo que el ámbito tecnológico e informático se refiere, por lo que optimizarás recursos al no tener que gastar ni un euro en ordenadores u otros materiales electrónicos. De esta manera, todos tus trámites, tus cuentas… Estarán a la orden del día con el objeto de que todos los documentos de tu negocio estén en una base de datos para hacer uso de ellos desde un archivo en el que se guardarán correctamente para poder gestionarlos siempre que se requiera.
Tus peticiones y dudas tendrán un carácter confidencial y todo se producirá en un ambiente de discreción por el secreto profesional de los asesores. Por último, podrás añadir el conocimiento de tu equipo de asesores para que, en función de sus planes o sus planteamientos, puedas incorporar sus suposiciones en tu estrategia como empresa para intentar maximizar tus intereses y, por ende, tus beneficios.
¿Qué servicios me ofrece una asesoría?
Un asesor puede abarcar diferentes áreas de trabajo para ofrecer unos servicios básicos que puedas necesitar en cualquier momento. Por ejemplo: la fiscalidad de un negocio es imprescindible tenerla al día. Hay que tener todo pagado para evitar llevarnos sorpresas, por ejemplo, en una inspección. Además, podrán ayudarnos en la tramitación de la situación laboral de nuestros empleados, gestionando trámites de alta y baja en la Seguridad Social, nóminas, pagos, convenios, prevención de riesgos laborales… Así como todo el tema de la contabilidad, ya sea del día a día o a nivel anual para evaluar la evolución del propio negocio. Por último, también podrás consultar cualquier duda jurídica.
Como te habrás podido dar cuenta, es muy necesario y, a la vez, recurrente, contratar los servicios de un asesor. Su trabajo puede evitarnos muchos quebraderos de cabeza y facilitarnos nuestro trabajo y, en general, nuestra vida. Invertir en un asesor será de lo que mejor que hagas en tu empresa, y eso lo verás desde el primer día que disfrutes de su presencia.
