Las ayudas están destinadas a obras de conservación, accesibilidad y eficiencia energética; facilitando a los propietarios subvencionar en buena parte las obras de aislamiento de fachadas, o para instalar sistemas de climatización.
Por esta razón empresas como Insignia Rehabilitación y otras del sector, se preparan para el aluvión de solicitudes de trabajos que están teniendo. El objetivo de estas ayudas es mejorar las prestaciones de los inmuebles, sobre todo de los más antiguos, para mejorar la calidad de vida de quienes viven en ellos y equiparar la igualdad de oportunidades, para que puedan acceder a esta rehabilitación quienes no tienen rentas tan altas.
Porque al final se consigue un dos por uno; no solamente se logra esa eficiencia, logrando un ahorro en aire acondicionado y calefacción, sino que también se consigue una mejora estética, dando un aspecto renovado al edificio, que además gana en valor. Es muy importante elegir una empresa seria, porque cuando se trata de trabajos en altura, la formación en prevención de riesgos es un elemento vital y que puede variar mucho la calidad de una empresa a otra. Es responsabilidad de la empresa que sus trabajadores cuenten con la debida formación en la prevención de riesgos laborales.
Cuando se realizan inversiones de este calibre, no vale la pena escatimar. Compensa elegir una empresa profesional y con garantías. Porque son obras con técnicas complejas que requieren de una correcta ejecución.
Cómo tramitar las subvenciones
Informarse acerca de estas ayudas es un proceso muy sencillo, la información las proporcionan en las oficinas municipales de rehabilitación tanto a propietarios de edificios como a comunidades de vecinos. Ya no hay excusa para que los vecinos puedan ponerse de acuerdo y emprender una obra, que va a proporcionar calidad de vida y ahorro a todos, puesto que estas subvenciones hacen que se puedan emprender las obras, siendo accesibles a todos.
Es una inversión que compensa
Con los aislamientos térmicos ahorramos energía, hasta un 50% de la energía que se utiliza para la calefacción o el aire acondicionado, y por tanto reducimos gastos. Los sistemas para la mejora de la eficiencia energética en los edificios son varios, e interesa saber qué es lo que más conviene.
Por un lado destaca el Sistema de Aislamiento Técnico por el Exterior (SATE), que evita mediante el uso de materiales aislantes que la temperatura del exterior se transmita al interior. En verano reducen la transmisión del calor de fuera al interior de la vivienda y en los meses de invierno se logra el efecto contrario, las casas no están tan frías, lo que nos permite ahorrar en electricidad. El SATE es muy recomendable para edificios ya construidos. Con la actual conciencia ecológica, está además acorde a nuestras necesidades.
Por otro lado encontramos el sistema de fachada ventilada, donde hay un control del flujo del aire a través de una doble cámara, logrando un considerable ahorro de energía en todo el edificio. Es una solución no sólo eficiente sino también muy ecológica, y muy sencilla de implementar en edificios ya construidos y, sobre todo, en edificios de obra nueva.
Una realidad sobre la eficiencia energética
Son nuevas necesidades que se adaptan a la realidad y que reflejan una demanda por unos cambios de hábitos y de mentalidad de los propietarios de las viviendas. Hasta ahora al comprar o alquiler una vivienda, habíamos tenido en cuenta el precio y calculado los gastos en facturas, sin plantearnos que es posible reducir el coste energético de esas facturas. La conciencia por el cambio climático ha ayudado a que entendamos que se pueden reducir los recibos y poder contribuir así a la conservación del medio ambiente.