Ya lo has decidido. Tras muchos años con tu automóvil, ha llegado la hora de darle la jubilación que se merece y buscar un coche nuevo. El mercado automovilístico ha cambiado muchísimo en los últimos cinco años, y puedes encontrar modelos de toda clase y con todo tipo de avances tecnológicos, algo que va a hacer tu conducción mucho más cómoda y que sabes que te será de utilidad.
Por eso, ya estás buscando opciones entre los diferentes concesionarios. Es posible que la idea de la segunda mano se te haya venido a la cabeza, incluso que hayas apalabrado más de una cita ya para ver qué tal están esos coches que has visto anunciados por internet. Pero, sabes que hay otras alternativas, ¿verdad?
Lo que vamos a contarte no es nada nuevo, pero sí que es algo que conviene recordar de vez en cuando por las ventajas que ofrece. Y es que puedes tantear la opción de importar coche desde Alemania. Nuestro país vecino, aunque algo alejado, puede ser el lugar perfecto para hacernos con modelos modernos por un precio mucho más barato que el que podríamos encontrar en cualquier punto de España, incluyendo incluso el gasto del desplazamiento.
Ahora, además, es algo que está teniendo especial sentido por lo económico que resulta. Modelos de gama media y alta se están encontrando a unos precios realmente bajos por numerosas razones, pero hay dos que son las predominantes.
La primera, el deterioro que causa la sal en las carreteras alemanas. Debido a las nevadas que tienen lugar en el país, se debe echar sal para evitar que estas sean peligrosas, y eso es algo que, al circular los vehículos, hace que se deterioren estéticamente. Ese factor, aunque parezca nimio, es uno que causa un gran abaratamiento a la hora de venderlos, aunque el arreglo no sea especialmente caro.
Por otra parte, también hay que pensar en la renovación que se está promoviendo en el país. El uso de los vehículos eléctricos se está extendiendo a tal punto que quieren que todos los ciudadanos alemanes circulen al menos con híbridos, haciendo que estos se desprendan de los tradicionales coches con motor de combustión al precio que sea. En efecto, es una oportunidad perfecta para comprar.
¿Cómo importo un coche desde Alemania?
A la hora de saber cómo importar un vehículo desde el país alemán, debemos decirte que puedes optar por la vía más fácil de todas, que es la de recurrir a un importador de coches para que se encargue de todo. Es cierto que, además de pagar el vehículo, tendrás que pagar ciertos costes adicionales por el servicio prestado, pero la comodidad es mucho más alta que la de cualquier otro método a seguir.
Las compañías que se dedican a eso ofrecen cobertura total en una gran cantidad de países tanto de dentro como de fuera de Europa, garantizando además la máxima transparencia y garantía a la hora de hacer de intermediarios entre el cliente y el vendedor. Se encargan de todo para que no tengas que preocuparte por nada.
No quiero intermediarios
En el caso de que quieras hacer las cosas por tu cuenta, te adelantamos que el proceso será más complicado que el que hay que llevar a cabo al contar con una empresa intermediaria.
Lo primero que tienes que hacer es localizar el vehículo que quieres comprar, algo que puedes hacer mirando a través de numerosos portales online. Cuando lo tengas localizado, debes contactar con su vendedor. Este puede ser uno de los puntos más complicados, ya que tendréis que hablar en alemán o inglés, salvo que tenga nociones de español.
¿Habéis llegado a un acuerdo? Es el momento de desplazarse, pero antes, es conveniente que tengas toda la documentación del vehículo para comprobar que todo está en orden. Solicita una factura o llega a un acuerdo con el vendedor para pagar una parte o la totalidad del automóvil, a la vez que recibes el libro de revisiones, la ficha técnica e incluso la carta de homologación en caso de ser necesaria.
Tendrás que conseguir las placas verdes provisionales de Tráfico para poder circular por todo el territorio nacional con el nuevo vehículo. De esa forma, luego, cuando ya vuelvas a tu localidad con él tras haberlo recogido, solo tendrás que cambiar la matrícula y pasar la ITV para que comprueben que todo está en orden según el reglamento español y que puedes circular sin problemas.
Con esto, ya te has hecho con tu nuevo automóvil por un precio mucho más bajo que el que hay en España. Te aseguramos que, a pesar de todo lo que hay que hacer, es mucho más rentable.
