Son los ecologistas de Greenpeace, esos chicos que leen, hacen estudios y los publican gratis para informar a la población de que, “en el país con más sol de Europa, los ministerios aprovechan solo el 1,25% de su potencial solar”; y para contribuir a aumentar este exiguo porcentaje, esta mañana temprano se han ido al Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, y han colocado en su fachada unas cuantas placas solares.
Durarán unos minutos (las placas y los peleones), porque ningún ministro quiere pagar el impuesto al sol, salvo José Manuel Soria el ex que lo aprobó. “Importamos el 72,3% de la energía, 20 puntos más que la media europea (53,5%)”, nos recuerdan desde Greenpeace.
“Solo 4 de los 15 edificios ministeriales cuentan con energía solar”, dicen. Casi es mejor no conocer el dato de las viviendas de los ciudadanos que pagan todo esto. “Hasta ahora, nuestro voluntariado ha analizado más de 400 edificios, descubriendo una superficie disponible para paneles solares equivalente a 24 campos de fútbol, que en 25 años podrían ahorrar a las arcas del Estado 114 millones de euros (138 millones sin el famoso ‘impuesto al sol’).