En la sociedad moderna, el exceso de vello en el cuerpo de la mujer sigue siendo motivos de tabú, sin embargo, muchas siguen prefiriendo estar sin vello. Por lo tanto, pasan horas en la lucha por una piel delicada y lisa.
Se puede eliminar el exceso de vello de varias maneras, tanto en casa como en los centros estéticos. También existen procedimientos que pueden eliminar el vello de forma permanente.
Lo importante es encontrar la forma que más se adapte a las exigencias de cada una y optar por un cuidado integral de las zonas a depilar, antes y después del procedimiento
Depilar y rasurar
Estas son palabras similares que significan en sí la eliminación de vello (estar depilado). Su principal diferencia son los diferentes principios de aplicación sobre la piel. Durante un rasurado, sólo se elimina su capa superior y la depilación puede afectar a la raíz del problema, el folículo.
Estos dos métodos determinan el intervalo de tiempo para la aparición de vello nuevo. En otras palabras, dependiendo del tipo de procedimiento, la rasurada (o afeitada) hace que la piel quede lisa por un corto período de tiempo, de 2 a 14 días, y la depilación elimina permanentemente el vello.
Encontrar el método ideal
Actualmente hay muchos tipos de depilación, como el afeitado, uso de cremas especiales, depilación con cera, luz pulsada, etc. Cabe destacar que aunque algunos crean que hay métodos permanentes la depilación láser sigue siendo el único procedimiento que elimina este problema para siempre.
Por fortuna, hoy en día existen en internet varias opciones de productos e incluso se puede revisar alguna comparativa de depiladoras de luz pulsada, estas son capaces de regalar los resultados más eficaces y seguros para las mujeres modernas.
Preparación
Antes de cualquier tipo de depilación lo mejor es tomar un baño caliente y utilizar una crema pre-depilatoria que, gracias a sus principios activos, prepara la piel para la depilación y hace que el proceso no sea agresivo y el acabado luzca perfecto.
Además, es bueno acostumbrarse a exfoliar la piel, con exfoliantes o guantes especiales. Sin duda alguna, esta operación facilitará la eliminación del vello, ya que hará que salgan a la superficie incluso los pelos que puedan quedar debajo de la piel y ayudará a prevenir la aparición de vello encarnado, algo que es bastante útil.
Tipos de depilación
La mejor forma de evitar cualquier clase de accidente a la hora de realizar la depilación es conociendo cuales son los procesos distintos que existen y cómo realizarlos correctamente. Desde luego, hay unos más famosos que otros, pero la decisión y es bastante particular:
La depilación con luz pulsada
La depilación con luz pulsada es una técnica estética que permite la eliminación permanente del vello no deseado. Durante el proceso, una luz policromática de alta intensidad se transforma en calor cuando golpea la melanina (el pigmento que da al vello su color oscuro). Esto genera un fuerte aumento de temperatura, que se transfiere al bulbo piloso, que sufre degeneración.
El principio de acción es comparable al de la depilación láser, con la diferencia de que esta última tecnología actúa en longitudes de onda unidireccionales y monocromáticas. La depilación con luz pulsada se puede realizar en salones de belleza certificados o clínicas dermatológicas, pero también existen dispositivos que se pueden utilizar cómodamente en casa.
Este dispositivo de depilación con luz pulsada previene el crecimiento de vello corporal y facial al proporcionar más de 250 pulsos de luz. La aplicación regular mantiene la piel tan suave como la seda todos los días. Por lo general, cuenta con cinco ajustes de intensidad de luz, ajustables según el tipo de piel.
Aplicación de cremas
Este procedimiento es recomendado por los médicos para eliminar el vello debajo de las axilas, en la cara y las manos. Para ello, se aplica una crema depilatoria sobre la piel, cuyos tipos se presentan para pelos de diferentes durezas, y después de un cierto periodo de tiempo se eliminan junto con el vello no deseado.
La composición de estas cremas incluye sustancias que afectan de forma destructiva a la queratina, el elemento estructural del cabello. Como resultado de esto, el vello desaparece.
Afeitado
Hasta hace poco, los tipos de depilación de bikinis, axilas y piernas convergen en el mismo procedimiento: afeitarse. Con el tiempo, se hizo evidente que se trata de un método sencillo, pero nada seguro. Todo el mundo sabe que una navaja de afeitar es un objeto cortante, por lo que cuando se realiza en la piel, al cortar el pelo, es posible dañar la capa superior de la epidermis.
Como resultado de esto, existe la posibilidad de infección, y ésta es la causa del desarrollo de procesos inflamatorios y de la formación de manchas. Sobre todo, no se recomienda aplicar un método similar en las axilas. Como la piel es sensible y muy fácil de dañar, especialmente debido a la mala ventilación, existe un alto riesgo de desarrollar infecciones. La ventaja de afeitarse es la simplicidad y la velocidad del método, pero incluso el cabello aparece rápidamente de nuevo.
Por esto, solo es recomendada en casos de emergencia.
