El PSOE se ve de nuevo al frente del Gobierno. Al menos ese ha sido el mensaje que la Ejecutiva Federal ha querido transmitir tras la reunión que ha mantenido esta mañana para analizar los resultados de las elecciones generales del 10 de noviembre y tantear los posibles pactos y acuerdos a los que tendrá que llegar con los diferentes partidos del arco parlamentario. Los socialistas han dado un primer paso hacia el desbloqueo que consiste en no cerrarse a formar un gobierno en coalición con Unidas Podemos -e incluso cuentan con la abstención de Ciudadanos-, pero sí han puesto una línea roja: no pactarán un ejecutivo de gran coalición con el PP.
?? El secretario general y presidente del Gobierno, @sanchezcastejon preside en #Ferraz la primera reunión tras las elecciones del #10N.
La CEF valorará los resultados de las elecciones celebradas ayer domingo, que dieron una amplia victoria al #PSOE con 120 diputados.#AhoraSí pic.twitter.com/UuDT3bt4WY
— PSOE (@PSOE) 11 de noviembre de 2019
El secretario de Organización del partido y ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, ha comparecido ante los medios tras la reunión y ha asegurado que el objetivo del PSOE es formar un gobierno "cuanto antes". Y solo ellos tienen la posibilidad de negociar un gobierno porque "no cabe otra alternativa". Ábalos ha descartado la alianza con el PP porque "están muy próximos a la ultraderecha y el margen es muy escaso".
Por ello, el PSOE necesitará de otras fuerzas políticas para sacar adelante una investidura. Sánchez intentará evitar apoyarse en los partidos independentistas catalanes, por lo que centrará su discurso y su negociación en conseguir los escaños de Más País, PNV, BNG PRC y TE. "Vamos a encarar los acuerdos con la máxima responsabilidad", ha asegurado el socialista.