Actualmente, en un mundo en el que todos nos parecemos tanto, hay muchas cosas que “están de moda”. A la vieja pero actual tendencia de ir “a la última”, con aquellas prendas de vestir que más se llevan o más “chic” quedan, se han unido otra batería de propuestas que personas de todo el mundo han asumido como propias: el ponerse a tono en los gimnasios, el de hacerse “influencers”… Y el de comer más sano, descubriendo otras formas de disfrutar de la comida e incluso experimentando diferentes tipos de dietas. Delaconca te puede ayudar.
Esta tienda puede descubrirte diferentes productos que no suelen estar en los grandes supermercados pero que marcan la diferencia y te permiten experimentar, y mucho, en tus recetas. La sal en escamas, por ejemplo, es un producto muy utilizado para diversas recetas con las que deleitar a nuestro paladar y descubrir nuevos sabores. Incluso podríamos descubrir nuevas formas de ver la vida y de alimentarnos, descubriendo el mundo del vegetarianismo, el veganismo… Quién sabe.
¿Qué ventajas me ofrece cambiar mi dieta?
Cambiar nuestros hábitos alimenticios puede tener muchísimos beneficios a corto, medio y largo plazo. Por ejemplo: comer más verduras y menos fritos tiene un valor nutricional muy destacable porque todo lo vegetal tiene más fibra, antioxidantes, potasio, magnesio y diferentes tipos de vitaminas (A, C, D, E…) con una lista muy rica de nutrientes esenciales que, desmintiendo los mitos, nos aportan las cantidades correctas de proteína en todo momento. Los aminoácidos, componente esencial de las proteínas, están garantizados en productos como las nueces, las semillas o todo tipo de legumbres.
Comer más sano también nos hace estar más felices. Es más: hay estudios que apuntan a que los veganos y los vegetarianos tienen grados menos frecuentes de depresión y presentan una predisposición mejor si hablamos de estados de ánimo. Como es lógico, también podrás bajar de peso con facilidad porque esta serie de productos tienen menos calorías que un filete o algo pasado por la sartén con mucho aceite, por lo que estarás evitando sobrepesos que deriven en una obesidad complicada.
Si comemos más sano y tenemos más defensas, prevendremos enfermedades. En estos momentos tan complicados a nivel epidemiológico como los que estamos viviendo, este punto es muy importante para evitar que se compliquen enfermedades coronarias, hipertensión, obesidad, cánceres relacionados con la dieta, diverculitis, estreñimiento, cálculos o piedras en diferentes órganos…
Por último, estarás protegiendo al medio ambiente porque no estarás explotando a algunas especies para vender sus productos y, a su vez, no estarás sobrecargando recursos como el del agua o cultivos masivos, incluso el de transportar todo tipo de productos cárnicos a través de camiones con sus respectivas emisiones al medio ambiente.
¿Cómo puedo comenzar a cambiar mi dieta?
Hay varios pasos que puedes ir dando para facilitar tu inmersión en este maravilloso mundo de comer sano, bien y rico. Por ejemplo: ve cambiando ingredientes de aquellas recetas que tanto te gustan. Si te gusta un pastel hecho a base de huevos, prueba a reemplazarlos por plátanos. Para comer, en vez de un filete, experimenta qué te despierta en el paladar con una rica hamburguesa de lentejas…
Además, tienes que ir cambiando los ingredientes de tu nevera: cambia la leche de vaca por leche de plantas (de soja, por ejemplo), el queso por tofu… Y busca recetas en las que puedas usar todos esos ingredientes. Además, tienes que informarte bien para suplementar tu dieta si no quieres correr ningún riesgo. Por ello, infórmate sobre cómo aportar a tu cuerpo la cantidad suficiente de vitamina D y proteínas.
Por último, no debes ocultarlo: habla de tu nueva forma de vivir con total normalidad y comparte con tus amigos, familia y allegados… Lo que sientes para. Así, podrás lograr más fácilmente tu meta. Tampoco sientas ningún tipo de miedo a la hora de comer fuera de casa: cada vez son más los restaurantes y comercios que se adaptan a esta nueva realidad con platos perfectamente adaptables a tu estilo de vida. Por ello, ser vegetariano o querer comer más sano ya no es un problema. Solo tienes que ser valiente para dar el paso, así que no dudes más y adelante.