Es sin duda el coche más llamativo de toda la parrilla de la F1, el VJM11 llama la atención con ese color rosa tan marcado acompañado del blanco. Un rosa aún más vistoso que el del año pasado (incluso en el famoso halo). Sin embargo, para los más observadores, ha habido un detalle aún más singular. Y es que ni en el monoplaza, ni en los monos de Sergio Pérez, Esteban Ocon y Nikita Mazepin, ni en los paneles decorativos hemos podido ver el nombre de la escudería pintado. Algo da alas a los rumores que señalan desde hace días que el equipo cambiaría su nombre al de FORCE Formula One Team. Incluso se llegó a afirmar que el equipo de Vijay Mallya
estaría en venta. No obstante esto último sí que ha sido desmentido categóricamente por el propio equipo.
Pero de momento y hasta que no digan lo contrario, el equipo que presentó su monoplaza esta mañana en Montmeló es Force India. Un coche que ha sido presentado literalmente para ser puesto en pista, ya que poco después del evento, Nikita Mazepin, el piloto probador del equipo, ha comenzado el rodaje del mismo.
El objetivo de este equipo, ya asentado en la parte media de la tabla, será continuar igualando, al menos, los buenos resultados de los últimos años, con una clara trayectoria ascendente. Desde su debut hace diez años, han ido ascendiendo progresivamente en la clasificación general de constructores. El tímido décimo puesto de su debut, sólo por delante de la extinguida Super Aguri se ha convertido en dos cuartos puestos consecutivos en 2016 y 2017. La escudería tratará de estar en el podio lo máximo posible.
