A diferencia de otros años, en la temporada de Fórmula 1 que está a punto de comenzar, McLaren tiene un reto muy claro, posicionarse como el cuarto equipo de la parrilla, como mínimo, y pelear con Red Bull por los podios cuando fallen Mercedes y Ferrari. Para la consecución de ese objetivo, McLaren cuenta con el mayor arma posible en un año de continuidad en el reglamento. Nada es tan importante para el equipo inglés ahora mismo como su nuevo socio, Renault. Tanto la evolución como la buena integración del propulsor galo en el MCL33 serán claves para que McLaren pueda ganar hasta un segundo de diferencia.
Sin embargo, ante una presentación tan esperada por los fans del equipo de Woking, lo que queda es el exterior, los detalles y la estética de un monoplaza que ha cambiado su decoración. Como se venía anunciando, McLaren se pasa al naranja papaya por “petición popular” incluyendo como color secundario un tono azul intenso que ya se intuía en los teasers del equipo inglés. Si la decoración no defrauda, sí lo hacen la escasez de sponsors a lo largo del chasis y también las claves técnicas de un monoplaza que apenas arriesga, pues es casi idéntico a su predecesor.
El frontal del coche mantiene su filosofía y no presenta novedades, a diferencia de la parte central, que aunque no está a la altura de los cuidados Ferrari, Mercedes y Red Bull, sí cuenta con variaciones en los bargeboards y en el suelo, que ahora presenta aberturas en los laterales. El trabajo de packaging para integrar el motor Renault en la carrocería ha sido arduo pero el resultado final es positivo. McLaren apuesta por unos pontones pequeños y elevados, pero también por una toma de aire superior diminuta.
En la puesta en marcha del equipo, que desde primera hora ha preparado su filming day, Alonso decía ser “optimista, pero también cauto” ante la temporada que se aproxima, porque McLaren necesitará de muchas horas de pista sobre el asfalto de Montmeló si quiere llegar en las mejores condiciones a la primera cita mundialista de la temporada para la que ya se espera un pack de mejoras que los ingenieros de la escudería de Woking llevan hasta tres meses preparando.