Tras los test casi clandestinos de Fontjoncouse en Francia a finales del pasado mes, el Polo GTI R5 ha tenido al fin su estreno de cara al público en tierras galesas. Los tests tuvieron lugar del pasado miércoles 6 al domingo 10 en los cuales el coche corrió sin problema alguno.
Los pilotos encargados de conducirlo fueron el sueco Pontus Tidemand y el austríaco Raimund Baumschlager. Sin embargo Tideman sólo se puso a sus mandos el jueves, ya que tuvo que ir a la gala de la FIA en Paris para recoger su trofeo como campeón del WRC2. El resto de jornadas las completó Baumschlager, piloto habitual de VW para estas tareas.
Sobre los test, el director técnico del equipo, Francois-Xavier Demaison, afirmó: “El feedback de los pilotos de test ha sido muy positivo. Es obviamente un beneficio el tener a un equipo experimentado de ingenieros y mecánicos, que han ayudado a desarrollar el Polo que ganó el campeonato del mundo”.
“Por no decir que, al igual que en el pasado, también tenemos la ventaja de una cooperación cercana y excelente con nuestros compañeros del departamento de desarrollo técnico en Wolfsburgo, así como de la gente de Skoda, que han estado ofreciendo a un R5 a sus clientes desde 2015”.
