Llegaba Rafa Nadal a tercera ronda de Wimbledon con la seguridad de haber realizado un gran tenis hasta la fecha, sin perder ni un set y volviendo a recuperar la vitola de favorito.
Aun así, podría tener en su mente presente aspectos como que no jugaba la segunda semana de Wimbledon desde el año 2014, por lo que este encuentro ante el joven ruso de 21 años Khachanov, se convertía en un partido clave para él, sobre todo, porque tendría la oportunidad de espantar a fantasmas que pudieran aparecer en su dura mollera.
Los fantasmas quedaron espantados y erradicados. Nadal cumplió con lo esperado venciendo al ruso en 3 sets y en tan solo 2 horas y 15 minutos. Con un juego agresivo y dominante, confirmaría que las sensaciones positivas mostradas en las 2 primeras jornadas no habían sido fruto de la casualidad o de la inspiración, incorporando su saque (hasta 13 aces) como nueva arma. 9 sets ganados de 9 jugados… Damos por seguro que este estilo ofensivo lo mantendrá en la segunda semana, decisiva en el torneo londinense.
Ahora, Nadal tiene todo un fin de semana para preparar el partido de octavos ante el luxemburgués Gilles Müller, un viejo rival del campeón español. Müller sería el encargado de eliminar a Nadal de este torneo, en segunda ronda, hace 12 años.
Bautista elimina a Kei Nishikori
La gran noticia del día la dio Roberto Bautista eliminando a Nishikori, todo un top ten y noveno favorito del Torneo de All England, al que nunca antes había podido vencer en sus enfrentamientos previos. El de Castellón, aconsejado en Londres por Tomás Carbonell, solo cedería un set (6-4, 7-6, 3-6 y 6-3) ante un Nishikori al que no se le vio en ningún momento a gusto en la hierba.
En la grada, siguiendo a Bautista muy concentrado, se encontraba un paisano suyo muy especial, Sergio García, el recién campeón del último Masters de Augusta.
Bautista se enfrentará en octavos el croata Marin Cilic, sexto en la clasificación de la ATP.
Por otra parte, señalar que Andy Murray sigue adelante, eliminado al italiano Fabi Fognini por 6-2, 4-6, 6-1, 7-5, pero dejando muchas dudas por su estado físico.
Como anécdota, se dio la suspensión del encuentro disputado entre Tsonga y Querrey, por falta de luz, cuando se estaba disputando el quinto set con un resultado de 6-5 a favor del estadounidense.