Última jornada de liga y para cerrar la temporada, el Sánchez Pizjuán acogía un bonito duelo entre Sevilla y Athletic Club de Bilbao. Ambos conjuntos se jugaban mucho. Los hispalenses, el todo o el casi nada, el entrar en la Champions o jugar la Europa League. Los vascos podrían perder la séptima plaza o robarle la sexta a su rival. La alineación sevillista sufrió un pequeño imprevisto de última hora con la baja de uno de los mejores futbolistas de la campaña, Pablo Sarabia, afectado de un virus intestinal. ¿Podría haber sido este su partido de despedida con la camiseta rojiblanca?.
El partido se inició con un Sevilla buscando el protagonismo en ataque pero sin llegar a conseguirlo. Aleix Vidal, Navas y Ben Yedder lo intentaban pero la cruda realidad es que los de Nervión no llegaban a chutar a la portería de Herrerín, mientras tanto el Athletic esperaba sin arriesgar demasiado y encontrándose muy seguro sin la posesión de balón ya que a su rival le faltaba, como en las últimas jornadas, intensidad, ideas y profundidad en el ataque.
Falta de ideas
Los minutos pasaban y el Sevilla era incapaz de generar peligro en la portería rival. Con un juego ramplón y sin ritmo es complicado hacerle daño a un Athletic que es muy sólido atrás y al cual el empate le servía. Los únicos que creaban algo de incertidumbre en el área vasca eran Navas y Ben Yedder. La falta de claridad ofensiva se tradujo en que hasta pasada la media hora no llegaría el primer remate, que no a puerta, del Sevilla. Escudero remataba un córner y su testarazo se marchaba desviado a la derecha de Herrerín.
Gol al descanso
Cuando el partido estaba más dormido y el Sevilla le daba el balón al Athletic, una pérdida vasca acababa con el esférico en la banda derecha y Navas sacaba un centro que remataba Ben Yedder. En primera instancia Herrerín conseguía salvar el tanto pero a bocajarro, el galo haría su diana número 17 en Liga, igualando su mejor registro (Toulouse, temporada 15/16). Un gol anímico al producirse en el minuto 44.
Cambio inesperado
El segundo tiempo se inició con un cambio sorprendente en las filas sevillsitas. Caparrós daba entrada a Gnagnon por Roig y colocaba al galo como centrocampista. Cabe recordar que Gnagnon ha actuado normalmente como central. Por parte del Athletic no se realizó ningún cambio. Mientras tanto, con la jornada unificada iban llegando noticias del José Zorrilla y del Cioliseum Alfonso Pérez.
El Sevilla parecía estar más entonado en esta segunda mitad con más velocidad en su juego y aprovechando los recursos que le ofrecían Aleix Vidal por banda derecha junto a Jesús Navas.
La jugada absurda del encuentro se produjo, como casi siempre con el VAR como protagonista. Un oenalti señalado por manos terminaba siendo anulado y resuelto con un saque de puerta. La grada no se lo creía.
El partido concluyó con el Sevilla buscando el segundo en alguna contra y sabiendo que los rivales directos para conseguir la cuarta plaza estaban haciendo su trabajo, es decir, ganar. Aunque el Getafe finalmente empataría. La cuarta plaza sería finalmente para el Valencia con 61, la quinta para el Getafe y la sexta para los de Caparrós. Un justo premio para los sevillsitas teniendo en cuenta la temporada realizada. En el añadido, Munir machacó a los leones con una contra que terminó con Herrerín fuera de su portería y rechazando un primer remate de Ben Yedder.
