La máxima competición de clubes de Europa no entiende de favoritos. El Madrid, campeón los últimos tres años y favorito siempre que juega en Europa, fue vapuleado en el Bernabéu por el Ajax (1-4) hace no más de mes y medio.
Algo parecido le ha ocurrido al Juventus de Cristiano. Sin llegar a ser un marcador tan abultado (1-2), el equipo italiano no olió la pelota en Turín y fue superado por un Ajax que hace historia entrando en semifinales 22 años después con un equipo que, si nada ni nadie lo evita, será desmantelado el próximo verano.
El Tottenham deja sin Champions a Pep
La otra gran sorpresa de esta Champions es el Tottenham de Pochettino. Los spurs dejaron en la cuneta al City de Guardiola tras un partido épico en el Etihad que acabó 4-3 para los locales, pero que clasificó a los londinenses tras el 1-0 de la ida.
Heung-min Son se erigió como la gran estrella de la eliminatoria con tres goles (uno en la ida y dos en la vuelta), y condujo al Tottenham a las semifinales de Copa de Europa por segunda vez en su historia.
Estos dos choques son el claro ejemplo de que la Champions, y no la ‘Superliga de Europa’ que quieren crear algunos, es impredecible, mágica y emocionante como siempre. Como dijo tras el partido del Juventus ante el Ajax Axel Torres, comentarista en Movistar+, “esto no podría pasar en una futura Superliga de Europa. Esto es lo que tiene la Champions.”
Liverpool – Barça, una final anticipada
Los otros dos clasificados para las semis eran más esperados que los dos primeros. Liverpool y Barça se mediarán en una de las eliminatorias más atractivas que se puede ver hoy en día. Los de Kloop llegan lanzandos, pero con la Premier League en la mente de todos.
El aficionado inglés prefiere la Premier League a la Copa de Europa, ya que las tres décadas que llevan sin levantar la liga inglesa prima más que la Champions League.
El Barça, sin embargo, tiene la oportunidad mágica de levantar su sexta Copa de Europa en un año que está siendo, hasta el momento, increíble. La oportunidad de hacer un nuevo triplete sigue intacta y con Messi todo es posible.