Qué semana para el golf español. Jon Rahm se ha quedado a las puertas de hacer historia. La primera vez que un español se metía en la final del Mundial Match Play, y lo hacía después de avasallar a todos sus rivales. Si el sábado no daba opción a Charles Howell III (6&4) y a Soren Kjeldsen (7&5), ayer hacía lo propio contra Bill Haas (3&2) para meterse en una final histórica. Enfrente el hombre del momento, el número 1 del mundo.
Una final con dos partes muy diferenciadas. Primeros 9 para Dustin, en los que llegó a ponerse 5 arriba, y segundos para Rahm en un alarde de garra impresionante para llevar el partido al 18. Y lo tuvo, porque de haber hecho aprocah y putt en el último hoyo hubiese forzado el play off. Un segundo puesto que ayer –seguramente- le dejó con un sabor agridulce, pero que no empaña una semana histórica para él y golf español en general. ¿Y ahora qué? Nadie se atreve a predecir nada con este joven de Barrika. Llega el Masters de Augusta (6-9 abril) y entra de lleno en todas las quinielas para poder llevarse la chaqueta verde. Augusta National es un campo -dicen los expertos- que hay que jugar muchas veces antes de triunfar, pero en vista de los prematuros resultados de Rahm cualquier cosa podemos esperar.
Gracias al segundo puesto de ayer, el vasco ha subido hasta la 14ª posición en el Ranking Mundial. García, que fue eliminado a manos de Rahm, ha perdido una posición (11º).