Una vez más el Alba demostraba que es uno de los mejores equipos de Segunda y de los principales candidatos a subir de categoría. En esta ocasión derrotando a un rival directo como es el Mallorca por dos tantos a cero.
Salía el conjunto de Ramis con un sueño en mente: volver a liderar en solitario la clasificación. Comenzaba el equipo manchego cómo nos tiene habituados. Apenas transcurridos seis minutos de juego, Bela inauguraba el marcador con un golazo de cabeza tras un centro de dulce de Tejero desde la banda derecha. El jugador francés la colocó en la escuadra, imposible para Reina. A pesar del batacazo inicial, el Mallorca no bajaba su presión en campo rival. Sin embargo a raíz del gol, el choque se quedaba en manos de nadie. Pocas ocasiones para ambos equipos. Rey Manaj tuvo un disparo desde fuera del área, pasada la primera media hora, que se marchaba cerca del palo. El queso mecánico estaba mucho más metido en el encuentro que los baleares pero el partido estaba todavía en vilo. Llegaba el descanso de un choque que no estaba siendo precisamente vistoso de ver en cuanto a ocasiones y juego pero de gran disputa por ambas partes. Todo por decidir entre dos entidades que pelean por ascender a Primera.
Reanuda el choque con la misma melodía que en el tramo final de los primeros 45 minutos. El conjunto balear sin dejar de intentarlo y el Alba manteniendo una defensa férrea. Los locales no encontraban la forma de alargar el marcador y poner tierra de por medio en el partido. Ramis quitaba del campo al autor del único tanto, Bela, para dar entrada a un jugador más defensivo como es Malsa. Hasta el 92 no llegaba el 2-0 de pies de Susaeta desde los once metros. Tenía la última el Mallorca en un córner al que también se sumó al ataque Reina. No le salió bien la jugada al portero ya que de inmediato el Alba ejecutó la contra con Febas a la cabeza que recorre más de 20 metros con el balón y finalmente es derribado por un defensa dentro del área. Susaeta no fallaba y cerraba el choque. El Belmonte explotaba de euforia por ver a su equipo en la cima de la Liga.