Sevilla 5-0 Levante: festival de goles

Bonita mañana de fútbol la que se presentaba en el Sánchez Pizjuán, con no demasiado frío para abrir la jornada número 21 en un duelo entre Sevilla y Levante. Los andaluces tenían en la jornada del sábado la necesidad y casi la obligación de sumar tres puntos para no entrar en una dinámica de resultados negativos en la competición doméstica. Sería la quinta jornada en la que no gana, con dos empates y sendas derrotas ante Athletic y Real Madrid. 
Los de Machín, mermados por una plaga de lesiones que no cesa en la temporada, se vieron obligados a introducir nuevos cambios en el once titular. Se incorporó a los de inicio la última incorporación del mercado invernal, el central Wöber dejando en el banco a Kjaer. Otro de los que regresaba a la titularidad fue Aleix Vidal, que actuó de carrilero derecho por el lesionado Navas. También tuvieron descanso Sarabia que vio empezar el encuentro desde el banco. Por el lado granota, regresó a la que fuera su casa, Coke. 
El encuentro comenzó con un Sevilla bastante incisivo por banda derecha, tanto es así que en una gran acción personal de Aleix Vidal, este se la da a Ben Yeder y con la posición ciertamente escorada está a punto de hacer el primero cuando apenas se habían cumplido un par de minutos. A partir de ahí el Sevilla se diluyó en el primer cuarto de hora. El Levante se fue acercando y teniendo la pelota para buscar los centros y los balones a la espalda de la zaga sevillista. 
Las lesiones siguen mermando
En la previa se hablaba de los problemas que está teniendo los sevillistas con las lesiones, pues parece que en este encuentro tampoco se libraría. A los 11 minutos, el central Sergi Gómez necesitó ser sustituido por Mercado. El argentino ingresó sin calentar. Entre tanto, el Levante avisaba con un remate a la salida de un córner con Boateng como protagonista. 
El Sevilla se reencuentra
Poco a poco los de Nervión se fueron encontrando más cómodos sobre el césped y André Silva y Ben Yedder fueron recibiendo más balones aunque siempre fallaba ese último remate que permite contabilizar la ocasión o llegar a hacer gol. La velocidad de Promes ofrecía una gran alternativa en el ataque sevillista y en varias ocasiones centró pero no llegó a encontrar rematador. Cuando casi se llegaba al descanso y con un Sevilla que ya tenía el control total del encuentro, Roque Mesa se sacó un disparo raso que impactó en el poste izquierdo de Oier, rechace lo remató con poca fuerza André Silva. Con esto se llegó al descanso. 
Inicio inmejorable
El segundo tiempo se inició de la mejor forma posible. A los 3 minutos, el mismo protagonista que en el primer acto, Ben Yedder recoge el esférico tras una gran jugada dentro del área para abrir la lata y llevar cierta calma a la grada. Donde parece que no va a llegar la grada es en el aspecto de los lesionados. Esta vez le tocó a Aleix Vidal. Lo sustituyó Sarabia. 
Susto contra la madera
El Levante no se amilanó y siguió buscando la portería de Vaclik. En un acercamiento, un remate granota se envenenó tras desviarse por la intervención de Promes. El esférico terminó golpeando la madera ante la atónita mirada de Vaclik, se rozó el empate visitante. 
Tras el aviso levantinista, el Sevilla no tardó en volver a ponerse las pilas para buscar ampliar la ventaja. En el minuto 60, Promes entraba con espacios por banda derecha y con claridad se la daba por bajo a Andre Silva para que este hiciese el 2-0. Ahí no acabó todo. El Levante bajó los brazos y el Sevilla olió sangre. El tercero llegaría en el 71. Esta vez los protagonistas fueron Sarabia como asistente y Franco Vázquez como goleador. Por banda izquierda entró el madrileño para dársela en franca posición al argentino y poner el 3-0. 
El partido estaba sentenciado pero no finalizado en lo que a goles se refiere. El recital goleador continuaba porque los rojiblancos, no querían que se detuviese la sangría. Esta vez Promes provocaba un penalti tras un gran sombrero a su par. Se encargó de ejecutarlo Pablo Sarabia en el 80. Esta no sería la única pena máxima del encuentro. En el 90, Roque Mesa, otro de los grandes protagonistas del encuentro fue derribado en el área y el colegiado no dudó en señalar el punto de penalti. Esta vez lo lanzaría Promes tras la petición de la grada y tras fallarlo, recogió el rechace para cerrar el marcador. Con la manita y con un Sevilla que buscó el sexto y casi estuvo a punto de lograrlo, se llegó al final. 
El Sevilla se coloca tercero con 36 puntos a la espera de lo que haga el Real Madrid el domingo en su visita a Cornellá. Con estos 5 goles, los andaluces son el segundo equipo de La Liga que más goles a favor tiene (36), muy lejos de los 56 de su próximo rival en Copa, el Barça.