El Real Madrid ha confirmado, alrededor de las 8 de la tarde, lo que era un secreto a voces en Chamartín. Solari se convierte en entrenador blanco, dejando así la etiqueta de 'interino'. Una racha de cuatro victorias en cuatro partidos, 15 goles a favor y sólo dos en contra le han alzado a proclamarse nuevo técnico madridista.
Solari firmó hasta el 30 de junio de 2021, es decir, por una temporada más de lo previsto. La medida debe ser interpretada como un deseo del club de trasladar una imagen de estabilidad tras un arranque de curso ciertamente turbulento, lo que llevó a la destitución del antecesor de Solari, Julen Lopetegui.
Florentino Pérez pone así en manos del técnico argentino el proyecto del Real Madrid 2018-19, tras el fracaso de la apuesta por su antecesor, en una temporada marcada también por la salida del club de Zinedine Zidane, el técnico de las tres Champions consecutivas, y de Cristiano Ronaldo, el máximo goleador en la historia madridista.
Bajo el mando de Solari, el equipo ha recuperado la estabilidad y los resultados. Debutó en el partido de ida de dieciseisavos de final de la Copa ante el Melilla, que se saldó con un contundente 0-4 a favor del Madrid. Posteriormente, recuperó el pulso ganador en Liga tras cinco jornadas de sinsabores (cuatro derrotas y un empate), al superar al Valladolid (2-0) en el Bernabéu. Más tarde, certificó el pase de los blancos a los octavos de Champions al derrotar por 0-5 al Viktoria Plzen en la República Checa, dejando abierta la posibilidad de que el equipo pase a las eliminatorias como primero de grupo, algo que lleva dos años sin lograr. Y, por último, repitió triunfo liguero en el partido más delicado de la era Solari, al derrotar al Celta en Balaídos por un contundente 2-4. Un triunfo que, además, permitió a los blancos recortar la desventaja con respecto al Barcelona a cuatro puntos.