Al comienzo de la temporada pocos podrían imaginar que un Deportivo de la Coruña – Betis tendría tanta miga. El banquillo coruñés lo ocupaba Asier Garitano y el hispalense Gustavo Poyet. Los resultados, como suele pasar en la mayoría de los casos terminaron por acabar con la carrera de ambos entrenadores en Deportivo y Betis. Ahora, en el mes de marzo y en un encuentro que se aplazó por el temporal en Galicia, se sientan en los banquillos Víctor Sánchez del Amo y Pepe Mel.
Un pasado demasiado reciente
La historia de Pepe Mel y el Betis es un ejemplo perfecto de amor eterno declarado tanto por una parte como por otra. Mel, canterano del Real Madrid jugó cuatro temporadas como futbolista en el club de Heliópolis. Tras esta etapa como jugador, también tuvo la oportunidad de dirigir como técnico a los verdiblancos.
En su etapa como entrenador tuvo momentos dulces y amargos. Desde ascensos a primera hasta clasificaciones europeas y despidos por sus malos resultados. A pesar de que no concluyó su última campaña en el Betis, el buen recuerdo de la afición verdiblanca es imborrable y cuando las cosas no funcionan en el conjunto de las trece barras, siempre hay quien se acuerda de Pepe Mel para que venga al rescate. Esta temporada el que ha acudido a sus servicios ha sido el Deportivo de la Coruña. De momento, tras dos partidos suma 4 puntos, consiguiendo poner contra las cuerdas al Atlético de Madrid.
Un referente deportivista
El caso de Víctor Sánchez del Amo es muy similar al de su homólogo en el banquillo coruñés. Al igual que Mel, Víctor fue canterano del Real Madrid pero llegó a disputar tres campañas con el primer equipo. Tras una temporada en el Racing de Santander, llegó al Deportivo de la Coruña para ser un referente del medio campo durante 7 temporadas.
Como entrenador aún no ha engrosado demasiado su currículum aunque como segundo técnico de Michel estuvo en Getafe, Sevilla y Olympiacos. Como principal técnico llegó a Coruña en la 2014-15 y completó la 2015-16. Ahora, como líder del Betis busca alejarse del descenso y terminar la temporada de la forma más cómoda posible.
Víctor y Pepe Mel, criados en la cantera madridista, triunfaron como futbolistas y como entrenadores siguen vinculados al fútbol. Lo más normal este miércoles quizás sería verlos en banquillos diferentes pero los resultados mandan. Cuando el árbitro haga sonar su silbato dejarán a un lado sus sentimientos para intentar hacerse con los tres puntos en juego.
