Primer partido en la fase de grupos de la Champions, primera victoria y primera exhibición del capitán, que ejerce de líder temporada tras temporada. Y es que Leo Messi ha vuelto a ser decisivo, esta vez en un partido que permite al Barça sumar los tres primeros puntos de la fase de grupos y liderar la clasificación, tras la victoria del Inter contra el Tottenham (2-1). Y lo hecho contra el PSV, que no lo ha puesto fácil a pesar del resultado final (4-0). Pero el hat-trick del argentino, el octavo en la Champions, y un auténtico golazo de Dembélé han frenado a los de Van Bommel, que lo han intentado pero no han podido hacer nada para detener al mejor del mundo.
Y es que Messi nunca falla a la cita y, como suele hacer, ha sido determinante tanto en el primer tiempo como en la reanudación. Primero, se ha encargado de allanar el camino con una de sus especialidades, un lanzamiento de falta que ha dejado en nada la estirada de Zoet, el portero del PSV (1-0, min 32). Diana que ha sido el premio azulgrana a la paciencia con la que se han disputado unos primeros minutos con dominio de balón y peso del juego ofensivo, pero en la que los visitantes también han estado a punto de adelantarse.
Porque, a pesar de la magia de un Coutinho inspiradísimo en su debut en la Champions como azulgrana, la velocidad y la solvencia defensiva de Jordi Alba, los intentos de Dembélé o las ocasiones que han tenido Suárez o Sergi Roberto, el equipo del exazulgrana Van Bommel también ha rozado el gol. Especialmente en ocasiones creadas tras jugadas al contragolpe, como la que ha tenido Bergwijn en un disparo con rosca (min 13), o con rechazos que han acabado sin aprovechar, pero por poco, como el remate desviado de Pereiro (min 8) .
Oh là là Dembélé
Así pues, el gol de falta de Messi, que ha marcado por 14ª temporada consecutiva en la Champions, ha sido el que, finalmente, ha abierto el marcador. Pero también el partido, porque la segunda mitad se ha iniciado con mucha ida y vuelta. Eso sí, hasta que el propio Messi ha decidido poner la pausa y el Barça ha podido tomar el control del encuentro. El objetivo, detener definitivamente al PSV, que había llegado con peligro a la contra.
Y ha funcionado, especialmente porque, con la combinación del Barça más fluida, una acción ha marcado el final del duelo. La ha protagonizado Dembélé, que ha decantado la balanza con una obra de arte, un auténtico golazo tras un disparo lejano pero con rosca que ha hecho estallar al Camp Nou (2-0, min 30).
El capitán comienza en forma
Un gol que los aficionados del Barça no han podido terminar de saborear, porque rápidamente han pasado de celebrar el 2-0 azulgrana a cantar el doblete de Messi. El capitán ha vuelto a hacer de las suyas y ha sentenciado el duelo con un remate de primeras precioso tras una buenísima asistencia de Rakitic (3-0, min 31). Pero es que el '10' no ha tenido suficiente y, tras la expulsión de Umtiti -se perderá el partido contra el Tottenham- y la entrada al terreno de juego de Lenglet y Arthur, ha cerrado el marcador con otro gol. El que ha significado el 4-0 definitivo (min 32) y su octavo hat-trick en la Champions.
Todo ello para sumar los tres primeros puntos en la fase de grupos de la Champions, una competición que el Barça ha comenzado, pues, con muy buen pie. El próximo miércoles día 3 de octubre, Wembley seguirá poniendo a prueba a los de Valverde.